Varios sujetos destruyeron un cajero automático con el uso de equipo de acetileno y sustrajeron ¢50 millones.
Los hechos se registraron este miércoles en la madrugada en Pejibaye de Pérez Zeledón, San José, confirmaron la Fuerza Pública y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
De acuerdo con el reporte de las autoridades, una alarma de Coopealianza se activó y por ello el encargado realizó una revisión en el sitio.
En ese momento, descubrió daños en la parte trasera del cajero, por lo cual hizo el reporte en el servicio de emergencias 9–1–1.
“El cajero automático y la bóveda fueron forzados, sustraen el dinero y huyen en un pick–up y vehículo 4x4 negro a alta velocidad.
“Se mantiene escena en custodia, debe realizarse conteo de pérdida”, explicó escuetamente el Ministerio de Seguridad Pública por medio de su oficina de prensa.
Por su parte, la Policía Judicial detalló que el caso se mantiene en investigación, pero que en este atraco, efectivamente, se utilizó equipo de acetileno.
El uso de estos instrumentos de corte, soldadura y calentamiento de metales no es algo nuevo para las autoridades; por el contrario, son comunes en el Caribe.
Otros casos
Precisamente, en enero anterior, un grupo de hampones robaron un cajero automático dentro de una finca bananera en el Carmen de Siquirres, Limón.
Los cinco hampones que participaron en el atraco tenían cada uno de sus pasos calculados. Lo primero fue amordazar y amarrar a los dos guardas de seguridad de la propiedad, después rompieron paredes y puertas para ingresar y con un mazo destrozaron el cubículo donde se encontraba el cajero, el cual sustrajeron utilizando el gas.
Sin perder mucho tiempo, montaron la máquina a un vehículo y los cinco hombres escaparon del lugar.
En medio de la fuga derribaron varios árboles y los dejaron sobre vía pública, colocaron mangueras y cadenas con clavos, así como varillas con picos, eso impidió el paso de las patrullas de la Fuerza Pública que atendieron el llamado de emergencia, luego de que se emitiera un reporte de seguridad bancaria.
Los oficiales tuvieron que bajarse y quitar los obstáculos para poder llegar al lugar del robo, al tiempo que los guardas alertaron a sus superiores de lo ocurrido.
Además, en octubre del 2019, la Policía frustró el robo de un cajero de Coopealianza en Guápiles de Pococí, Limón.
El sistema de monitoreo de cámaras de seguridad de la cooperativa alertó a las autoridades y por ello un grupo de oficiales de Fuerza Pública acudió al lugar; sin embargo, antes de que llegaran, los hampones escaparon.
Al ingresar al recinto, los oficiales se percataron de que la puerta de la caja de seguridad fue cortada en poco menos de un 50%.
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