Texto original publicado por La Nación el 22 de mayo de 1971.
Un odontólogo, que ejerce en un lugar de esta capital, fue formalmente acusado por dos personas porque habría cometido un atentado contra el pudor de una paciente, cuya familia lo acusa además de habérselas ingeniado para intentar la violación de la supuesta víctima.
En la denuncia firmada, que se encuentra en poder de las autoridades de investigación, se hizo referencia a que una joven, menor de edad, fue con su madre a la consulta de este profesional quien le extrajo una muela.
Consta en la denuncia además, que el odontólogo dijo a la madre de la paciente, que ésta tenía un daño grave en la mandíbula.
“Es necesario efectuar una radiografía para localizar la infección”, habría dicho el sospechoso.
Dice la señora denunciante que la joven entró en un presunto departamento de rayos equis. De repente, la joven salió dando gritos y dijo que el hombre la había despojado de las ropas y que intentó violarla.
También denunció que tuvo que forcejear violentamente con el supuesto atacante.
Las autoridades tratan de establecer la veracidad de esta denuncia con el fin de que los tribunales comunes intervengan.
No obstante, lo que hay de extraño en el caso es que las radiografías que practican los odontólogos, dijo una fuente policiaca, no son iguales a las que se efectúan en otras partes del cuerpo.
Radiografías dentales se hacen en la misma silla especial, concluyó el uniformado.
En otras noticias:
Niños acusaron a su agresora
Las investigaciones para aclarar la muerte de un niño de cuatro años cometido en el barrio Los Ángeles de Cartago a las 9 a. m. concluyeron con el informe de los agentes de la sección de homicidios de la DIC.
Tres hermanos del fallecido dijeron a las autoridades que la señora que los cuidaba los golpeaba constantemente y los sometía a maltratos inenarrables.
Dijeron que la mañana que murió su hermanito menor, la mujer lo llevó arrastrado a un baño de la casa, lo golpeó salvajemente y lo lanzó contra la pared de cemento, donde quedó, en apariencia, inconsciente.
Astronauta Lovell dejaría el espacio
El capitán James A. Lovell Jr., el astronauta de mayor experiencia en el mundo y comandante del casi trágico vuelo del Apolo 13 a la Luna el año pasado, deja el cuerpo de astronautas y asume un cargo ejecutivo en la agencia espacial.
Lovell, veterano de más de 29 días en el espacio, fue nombrado director del departamento de ciencias y aplicaciones en el centro de vuelos tripulados en Houston.
El astronauta de 43 años detenta el actual récord mundial de tiempo en el espacio a raíz de cuatro distintas misiones espaciales.