Un jardinero, de apellidos Mejía Romero, afrontará a partir del martes un juicio en los Tribunales de Corredores como sospechoso de hurto agravado.
Al parecer Mejía, de 56 años, sustrajo la tarjeta de débito a una mujer de apellido Rodríguez, que lo contrató para una chapea en su propiedad en Corredores, Puntarenas.
Según la acusación, Mejía y su compañera sentimental, una mujer de apellidos Bonilla Quirós, de 47 años, son sospechosos de usar la tarjeta para sustraer ¢150 millones, luego de más de 600 retiros de dinero en diferentes cajeros automáticos y locales comerciales.
La pareja realizó los retiros durante casi 10 meses, entre agosto del 2010 y junio del 2011.
Se presume que Mejía aprovechó un viaje de vacaciones de su patrona para entrar a la casa y sustraer la tarjeta. Para ello habría usado llaves de la vivienda que tenía en su poder.
Fue hasta el año siguiente que Rodríguez se percató de que le habían vaciado la cuenta.
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Aparentemente el dinero sustraído era de una entidad crediticia de la cual la víctima era administradora, por lo que al enterarse del robo interpuso la denuncia.
Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) allanaron la casa de los sospechosos en Veracruz de Corredores, donde decomisaron varios electrodomésticos y otros bienes que habrían sido adquiridos con la tarjeta.
Mejía Romero es vecino de Río Claro de Golfito, mientras que Bonilla ahora vive en Osa.
Ocho años después de los hechos, los imputados, que han permanecido en libertad, van a comparecer en los tribunales entre el 16 y el 18 de octubre.