La fiscala general de la República, Emilia Navas Aparicio, señaló al exsubjefe de la oficina de Investigaciones Criminales del OIJ, Luis Guillermo Fonseca Herrera, como la persona responsable de propiciar fuga de datos de un caso en investigación.
La aseveración la hizo durante un juicio que se realiza contra Fonseca en los Tribunales de Goicoechea, por el delito de divulgación de secretos, en el cual Navas compareció como testigo.
El caso que se juzga está relacionado con un operativo policial que se realizó el 9 de agosto del 2017, en el cual se desarticuló una red dedicada a cometer fraudes de naturaleza notarial-registral en contra de ciudadanos extranjeros y de entidades bancarias.
Entre los imputados y, quien además fue detenido, figuraba un abogado de apellidos Martínez Fuentes, que es el suegro del Fiscal Adjunto contra el Crimen Organizado, José Francisco Fonseca Ramos.
En su declaración, Navas precisó que, al momento de los hechos, ella era fiscala de Fraudes y estaba llevando el caso en contra de la red junto con otros dos fiscales. Dos días antes del allanamiento, el 7 de agosto del 2017, se encontraba en una reunión conversando sobre otros temas con su jefe José Francisco Fonseca.
Agregó que en ese momento ingresó una llamada telefónica, que duró unos pocos minutos. Al colgar el teléfono Fonseca le dijo: “Ay doña Emy, porque siempre me decía así (...) es que vieras que Luis Guillermo Fonseca me preguntó que tan cercano era yo con mi suegro, porque ya me contó (...) que ustedes en fraudes lo están investigando y que en los próximos días le van a dar”.
Consultada Navas sobre el significado de “le van a dar”, respondió: “por la experiencia que tengo de trabajar con los compañeros del OIJ, es que vamos a allanarle y vamos a detenerlos”.
La fiscala general explicó que al conocer esta situación se molestó mucho y agregó que minutos después llegó Luis Guillermo Fonseca a la oficina de José Francisco Fonseca, por lo que de inmediato se levantó y se retiró.
Navas declaró que ese mismo día redactó un correo o un edicto, que envió al fiscal general de aquel momento, Jorge Chavarría Guzmán, a la Inspección Judicial y la Fiscalía de Probidad, en el cual denunció el caso.
Ante una pregunta del procurador penal Federico Quesada Soto sobre si era viable que Luis Guillermo Fonseca le comentara al fiscal Francisco Fonseca sobre la investigación, la fiscala general manifestó: "él no debía dar esa información a don Francisco (...) por razones legales y razones estratégicas. Él no podía informar a un pariente de una persona que estaba siendo investigada de esa situación y, además, estratégicamente podría obstaculizar la investigación (...).
“Tenía un cargo de jefatura, es miembro del Poder Judicial y tiene una obligación de mantener la confidencialidad de las investigaciones y de las diligencias”.
Navas señaló que debido a la fuga de información debieron tomar medidas extraordinarias para evitar que los imputados escaparan, o que se perdiera información que el 9 de agosto debía ser decomisada y que era esencial para la pesquisa.
El juicio contra Luis Guillermo Fonseca continuará este viernes con la recepción de más testigos.
El delito de divulgación de secretos, según el artículo 346 del Código Penal, castiga con prisión de tres meses a dos años “al funcionario público que divulgare hechos, actuaciones o documentos, que por la ley deben quedar secretos”.
Debido a este hecho Luis Guillermo Fonseca fue despedido en setiembre del 2018 del cargo de subjefe de Investigaciones Criminales del OIJ.