La turista venezolana-estadounidense Carla Stefaniak programó un día antes de ser asesinada, el viaje que la llevaría de un hotel en Escazú al aeropuerto Juan Santamaría, en Alajuela, para abandonar Costa Rica.
El chofer que le iba a dar el servicio testificó este martes ante el Tribunal Penal de Pavas. En su relato, indicó que al llegar al hotel, un hombre le dijo que ella se había marchado más temprano.
Cinco días después, el cadáver de Stefaniak apareció a unos 300 metros de la habitación donde se hospedaba.
Por este crimen fue arrestado un guarda del hotel, de apellidos Espinoza Martínez. A partir de este lunes, el imputado enfrenta el juicio por homicidio calificado, robo agravado y tentativa de violación calificada.
El transportista, de apellido Chávez y quien pidió que no se divulgara su imagen, contó este martes que la primera vez que vio a Stefaniak fue el 27 de noviembre del 2018.
Según el testigo, ese día la mujer pidió un viaje de Uber desde un restaurante cerca del aeropuerto hasta el hotel Le Mas de Provence.
En aquella ocasión, el conductor le ofreció sus servicios turísticos personales y le hizo un recorrido por San José. Asimismo, acordaron que él la llevaría al Juan Santamaría al día siguiente.
Según lo acordado, él se presentó a recogerla a las 8:30 a. m.
“Llegué al portón. Había una persona en el portón, masculino, le pregunté por la joven Carla y me informó que ella ya no estaba en el hotel, que se había retirado temprano por la mañana, que se había retirado con otro Uber”, señaló el testigo.
“Yo me extrañé, me imaginé que tenía que hacer alguna diligencia antes o que el vuelo se había adelantado”, agregó.
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Chávez aseguró no recordar cómo lucía el hombre que habló con él, salvo que no era una persona mayor.
Este martes, también rindió testimonio Víctor Jiménez Castro, quien daba transporte a clientes y empleados del hotel Le Mas de Provence.
Jiménez contó que llevó a Espinoza Martínez a San José para entregar unas maletas que, según el guarda, eran regalos que enviaría a su familia en su país natal, Nicaragua.
Dos días después, se dio a conocer el hallazgo del cuerpo de Stefaniak, y ese día en la noche, fue arrestado Espinoza.
El taxista privado aseguró que en ese momento contactó a las autoridades para evitar verse involucrado en el crimen.
“Para mí fue algo muy impactante saber que la persona que yo había andado dos días antes en el carro, que yo lo llevé a San José con unas maletas, es el sospechoso en ese momento. ¿Qué pude haber pensado yo? mi carro fue utilizado, ¿qué transportó en el carro? ¿Qué pasó? ¿Qué hicieron con mi carro?”, dijo Jiménez.
El debate continuó con las declaraciones del criminólogo del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Francisco Bonilla Guzmán.
Bonilla hizo un recuento de las llamadas que realizaron y recibieron el sospechoso, otro empleado del hotel y el chofer de Uber que transportó a Stefaniak, en los días previos y posteriores a la muerte de la turista.