Un comerciante oriental pagó casi ¢22 millones a una organización delictiva por la liberación de su esposa secuestrada.
El dato trascendió este martes, cuando el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó sobre la captura de 12 personas implicadas en dicho hecho delictivo. Otros seis cumplen prisión preventiva por el hecho.
El secuestro de la mujer se produjo el 30 de setiembre a las 6:20 p. m. cuando ella llegaba a su casa en San Francisco de Dos Ríos, San José. Fue liberada el 4 de octubre en Escazú.
De acuerdo con el Ministerio Público, el mismo día del secuestro, el esposo de la víctima recibió llamadas extorsivas, en las que le solicitaron el pago de $200.000 (casi ¢125 millones) a cambio de liberar a su cónyuge.
Tras varias negociaciones, y en una fecha que no fue divulgada, los familiares entregaron ¢11 millones a los sospechosos de perpetrar el delito. Ese pago se realizó en Heredia; sin embargo, los sujetos no cumplieron su parte.
Según las autoridades judiciales, se produjeron otros contactos y se negoció una segunda entrega de efectivo en Escazú. El esposo de la víctima dejó en un vehículo de su propiedad $17.500 (casi ¢11 millones) y minutos después la víctima fue puesta en libertad.
Empero, oficiales de la Policía Judicial estaban enterados de los movimientos, así que le dieron seguimiento a la banda y lograron capturar a seis de los sospechosos en el límite entre Escazú y Alajuelita.
“Este caso tuvo una ramificación importante porque se dio en dos etapas. Después de la privación de libertad participaron múltiples personas y múltiples vehículos. Se dio una primera extorsión de $200.000, lográndose negociar un primer pago de ¢11 millones, dinero que fue pagado en Heredia.
"Posterior a este movimiento, parte de la misma estructura, pero con diferentes voces, llamaron al esposo de la víctima indicándole que era un segundo grupo para procurar un segundo pago, que se negoció por $20.000. Estamos hablando de la misma estructura”, explicó Christian Montenegro, jefe de la Sección contra Crimen Organizado (Secro) del OIJ.
Los primeros detenidos fueron identificados con los apellidos Gamboa Garita (mujer), Brenes Guillén, Cordero Montoya, Jiménez Calderón, Obando Corrales y Méndez Zamora. Contra ellos se ordenó seis meses de prisión preventiva.
Captura de líderes
Este martes, los agentes del OIJ lograron la detención de otras 12 personas que conformaban la organización, entre ellos a los dos supuestos líderes, un oriental de apellido Jiewen, conocido como Chino Cen (es señalado como el autor intelectual) y un sujeto apellidado Aguilar Mata.
Según el jefe de la Secro, este último sujeto es descrito por las autoridades como un hombre violento, el cual incluso ha disparado contra unidades policiales.
Chino Cen es señalado como el autor del plan pues tenía relación con la familia. "Tenía un conocimiento del núcleo familiar y de los negocios. Por ende fue la persona que facilitó la información y tuvo participación activa en la escogencia de la víctima. Es una relación de cercanía”, explicó el jerarca.
Las otras personas fueron identificadas con los apellidos Castillo Aguilar, Rojas Brenes, Morales Picado, Serrano Araya, Morales Moya, Bejarano Leitón, González Hidalgo, Méndez Fernández y Núñez Núñez; así como un menor de edad.
“El primer cobro no se logró recuperar, pero la investigación nos llevó justamente al grupo criminal, su identificación y su detención el día de hoy”, agregó Montenegro.
Aún falta detener a dos individuos más que no se encontraban en sus viviendas. Ellos fueron identificados como Jeffrey de Jésus Bejarano Leitón y Miguel Arturo Segura Quirós. Según la Policía Judicial, Bejarano Leitón cuenta con pasadas judiciales por delitos contra la propiedad.
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En Cartago se realizaron 11 allanamientos, incluidos los tres lugares de cautiverio en los que permaneció la víctima durante los cinco días del secuestro.
Entretanto, en San José se allanaron cuatro sitios, entre los cuales están la casa y el bar de Jiewen, ubicados en barrio Córdoba y en las cercanías del barrio chino, respectivamente.
De acuerdo con la investigación, la mujer fue retenida en tres casas de seguridad diferentes. Una ubicada en Paraíso, otra en Caballo Blanco y la última en Taras, todas localidades de Cartago.
En los operativos se logró el decomiso de vehículos, armas, teléfonos celulares y otros artículos de casa que fueron descritos por la afectada. Además, se decomisaron 700 municiones, entre las que había de escopeta, calibre 5.56, calibre 22, así como nueve milímetros.
La mujer y su esposo son comerciantes mayoristas de artículos de origen chino y también los distribuyen a otros locales.
El caso se investiga bajo el expediente 18-028103-1219-PE, por los delitos de secuestro extorsivo y dos tentativas de homicidio.
Estas últimas ocurrieron cuando uno de los involucrados, Aguilar Mata, habría disparado contra dos policías judiciales. Estos últimos fueron detectados por los imputados cuando se encontraban en labores de investigación.