En noviembre del 2011 se marcó un hito en la historia de las telecomunicaciones del país cuando Claro y Movistar comenzaron a ofrecer sus servicios celulares y se puso fin al monopolio del Instituto Costarricense de (ICE).
Sin embargo, la apertura no finalizó ahí. El Plan Nacional de Numeración había advertido de que para que existiese “competencia efectiva” era necesario implementar la portabilidad numérica; es decir, el poder mantener el número telefónico aunque se cambiase de operador.
La portabilidad era, además, uno de los derechos de los consumidores, según la Ley General de Telecomunicaciones aprobada en el 2008.
Ese derecho es una realidad desde el 30 de noviembre de este 2013, después de haberse vivido una serie de atrasos propios de la Superintendencia General de Telecomunicaciones (Sutel) y de que el ICE intentase detener su llegada por motivos diversos. Solamente en el 2012, el operador estatal presentó 20 gestiones para frenar el proceso , según el archivo de La Nación .
Tanto representantes de las empresas telefónicas como analistas independientes consideran que la portabilidad le dará un nuevo impulso a la competencia y beneficiará a los consumidores. Víctor García, director de regulación de Claro, dijo que traería “más promociones” .
No obstante el optimismo, una encuesta encargada por el viceministerio de Telecomunicaciones en agosto del 2012 indicó que solamente el 5% de los usuarios de teléfonos celulares estaban pensando en cambiar de operador . Ese relativo poco interés en el cambio explicaría la frialdad con que los costarricenses recibieron en la práctica su nuevo derecho a pasarse de compañía sin perder el número .
Los números oficiales que dirán cuántos clientes pidieron pasarse y en cuál dirección, aún no han sido hechos públicos por la Sutel. En cualquier caso, “la portabilidad numérica no se mide con la cantidad de personas que se pasen, sino con las ofertas que se ofrecen a los usuarios”, había dicho Glen Fallas, su director de Calidad .
El 4G ya está aquí
La portabilidad numérica comparte con la llegada de las redes de telefonía de cuarta generación (4G) los lugares de prominencia en el año tecnológico que estamos cerrando en Costa Rica.
Las redes 4G permiten una transmisión mucho más rápida de datos. En un mundo donde cada día consumimos más películas vía streaming en nuestras tabletas, o bajamos cada vez archivos más pesados de nuestro trabajo a los celulares, no se necesita explicar mucho porqué más velocidad es mejor.
El ICE terminó con su plan piloto y comenzó la venta comercial del servicio LTE, que es un “sabor” específico de tecnología 4G. Por ahora, solo funciona en datacards y tabletas, no celulares.
Claro y Movistar anunciaron que muy pronto ofrecerán también LTE, un sistema que cerrará este 2013 con 188 millones de suscriptores en todo el mundo .