El surf costarricense vive un momento de auge, nuevamente, como sucedió cuando Costa Rica organizó un mundial en el pasado
Después de la participación de Leilani McGonagle y Brisa Hennesy en el surf olímpico, el deporte de las olas se volvió a colocar de moda.
Costa Rica lleva más de una década considerándose con todas las armas para ser una potencia mundial del surf.
En el país hay buenas olas y talento técnico, no obstante de momento nuestra nación no goza de un atleta en el máximo nivel del surf internacional: el tour mundial.
En la actualidad, la única tica que corre en esa instancia es Brisa Henessy, no obstante el tema con Brisa es que ella ha tenido toda su formación como surfista fuera de Costa Rica, por lo que se convierte en una excepción.
Pese a todas las ventajas que ofrece el país y las buenas presentaciones hechas en mundiales ISA y ahora en los Olímpicos, lo cierto es que se ve muy lejana la participación de un costarricense en donde se reúne toda la crema del surf.
El Tour Mundial es la división a la que todo surfista quiere llegar, porque se vive del deporte de las olas, se buscan premios millonarios, empero son pocos los que tienen el privilegio de correr este circuito, solamente 34 hombres y 14 mujeres.
“Con lo que ofrece Costa Rica, no veo a ningún tico en el tour mundial después de Brisa: tenemos la olas, la calidad de atletas, personas que sabemos de surf, pero nos falta muchísima organización y además profesionalismo de parte del atleta para entender lo que se está jugando”, afirmó Diego Naranjo, exsurfista nacional y actual entrenador.
Para Naranjo, el país carece de un proceso claro de formación de surfistas y solamente se piensa en el presente, por lo que según sus cálculos en la actualidad hay un vacío generacional de 10 años.
“La Federación pasada, esa junta directiva estuvo 10 años y ellos no se imaginaron el surf sin Diego Naranjo, Lisbeth Vindas, entre otras figuras... Entonces si usted se va ahora al surf nacional llega a Noemar McGonagle y después de él no hay un joven que se asome... Si usted no tiene una estructura formativa difícilmente llegará a puro talento al nivel del Tour Mundial”, recalcó.
Naranjo añadió que pese a la responsabilidad de la Federación de Surf, él también es consciente que en el país muchos atletas han contando con las condiciones para brillar empero se toparon con falta de profesionalismo.
“No vale la pena entrar en nombres, pero le puedo decir que Costa Rica ha contado en la última década con al menos tres surfistas de calidad técnica de Tour Mundial, pero que cuando tuvieron que profesionalizarse no lo hicieron y ya ahora es tarde... En aquel momento tomaron decisiones equivocadas”, dijo.
El exdeportista enfatizó en que un surfista que aspire a la máxima competencia debe tener claro que necesita entre $100.000 y $150.000 al año para así salir de todos sus gastos y además cubrir la inversión que tiene correr en las diferentes fechas alrededor del mundo.
“Brisa es un caso aparte es 100 por ciento formada en Estados Unidos, ella tiene su carrera solucionada, tiene un técnico de campeones mundiales. El manejo de la carrera de Brisa es muy diferente a la de los demás atletas del surf del país”, acotó.
El periodista Carlos Brenes, experto en surf, contó que en el país se diseñó una estrategia de crecimiento para buscar destacar el talento individual, pero no se ha logrado romper la barrera de alcanzar la primera división del surf mundial.
“El Tour Mundial es el lugar al que quieren llegar todos, pero este tiene dos plataformas: la primera división y la segunda división, luego en Costa Rica está el Circuito Nacional y en el medio de ambas puede estar el Tour ALAS, que es el Latinoamericano, son como fases de crecimiento dentro de la carrera de surf”, explicó Brenes.
Costa Rica normalmente ha conseguido dominar su circuito local, también el Tour ALAS y ha logrado tener buenas participaciones en la segunda división del evento del orbe, pero sin poder entrar entre los mejores 34 del planeta.
“Hemos tenido algunos muy cerca, como por ejemplo Carlos Muñoz, Noemar McGonagle, Federico Pilurzu, la misma Leilani McGonagle, pero les ha faltado un pasito”, agregó.
Mario Ríos, actual presidente de la Federación de Surf, es claro en afirmar que el gran frenazo a que Costa Rica se integre al máximo nivel de este deporte radica en la parte económica.
“El problema es el mismo de siempre, al final vamos a un tema de presupuesto, de apoyo de la empresa privada al talento o del mismo estado, nosotros no podemos competir con una federación europea, porque por ejemplo ellos por clasificar a los Olímpicos ya entregan premios. También dan viajes para poder rozarse... Por ejemplo, ahora en el país todos hablan de Brisa, pero ella se costea todo para poder estar donde está”, contó.
“El gobierno apoya pero no es suficiente. Un viaje a Australia vale miles de dólares, no hay ni siquiera dinero para pagarle bien a un entrenador tanto en la parte técnica como en la física, entonces es un tema bien complejo”, añadió.
Ríos dio a conocer que bajo su gestión se está buscando crear un centro de alto rendimiento en Jacó, no obstante han encontrado muchos obstáculos de parte de la Municipalidad de Garabito.
“Hay una oportunidad para hacer un centro de alto rendimiento, pero todos son peros y burocracia, en los Olímpicos iban tres atletas de surf, fuimos la federación que llevamos más, por lo que podemos ver que sí tenemos material, ahora todo pasa por inyectarle a ese material el apoyo necesario. Con el centro de alto rendimiento se daría un gran paso hacia la profesionalización que necesita el talento”, finalizó.
Costa Rica cuenta con una ventaja a nivel de atletas como Leilani McGonagle y Brisa Henessy, debido a que ambas son muy jóvenes. En el caso de Leilani a la tica lo que se le pide, según expertos, es que trabaje más a fondo su parte técnica para así dar el salto de calidad que le falta.
“Leilani a mí me encanta como atleta, porque ella es disciplinada, es profesional, tiene metas, ahora lo que tiene que trabajar a profundidad es su parte técnica, porque está un par de escalones abajo de lo que se necesita para entrar al Tour Mundial, pero todo lo demás lo tiene y la parte económica ya ella ha trabajado patrocinios importantes”, recalcó Diego Naranjo.
Por su parte, Brisa ha logrado meterse en la élite del surf internacional por cuenta propia, por lo que sí ya llegó a ese escenario ahora el gran reto es mantenerse y aspirar a pelear por el cetro.
Ante esto, la evolución de las dos principales surfeadoras del país depende de sí mismas, empero el avance de la disciplina luego de ellas es el panorama que se ve confuso.