Sporting consiguió salvar la categoría. El cuadro empató 2 a 2 con Limón y los caribeños perdieron la categoría.
La tensión estuvo presente en la gramilla del estadio Ernesto Rohrmoser de principio a fin. La diana limonense que llegó en el minuto 70 puso los pelos de punta, porque los caribeños quedaron a un gol de la salvación y los josefinos a uno del descenso. 2 a 2 en el partido y 3 a 2 en el global a favor de Sporting.
Roy Smith se impuso en las alturas luego de un centro de Alexander Espinoza. El central sacó un testarazo que desvió Hernán Fener para dejar sin reacción a Carlos Méndez, arquero de Sporting.
Sporting y Limón F.C. llegaron al partido de vuelta con el cuchillo entre los dientes. Contrario a lo que fue el partido de ida, el de vuelta tuvo emociones de principio a fin. Sporting arrancó el cotejo corriendo hacia el frente, también tuvo el control de la pelota y fue el club que llevó más peligro en los primeros 30 minutos.
Pese a que Limón F.C. inició con una actitud agresiva el cotejo, el club caribeño nunca tuvo claridad en ataque, al punto que su gol del duelo de vuelta se dio por un descuido del arquero rival y no por virtud propia.
La diana caribeña se dio cuando el partido iba 1 a 0 a favor de Sporting, el juvenil Jorkaeff Azofeifa tomó un balón cerca de la media cancha y sacó un disparo lejano que Méndez observó como se le coló en el centro del marco.
Previamente, Sporting se había puesto en ventaja gracias a un gol de Youstin Salinas, el exdefensor de Saprissa sacó un disparo después de que Esteban Alvarado rechazara un remate de Rigoberto Jiménez.
El primer tiempo fue de mucho choque. El partido fue de garra, sin embargo en el complemento Sporting salió con la clara intención de evitarse complicaciones y dio la impresión de ser el equipo que necesitaba marcar, aunque más bien era el club que contaba con ventaja pese al 1 a 1 en el marcador.
Con solo siete minutos de la segunda parte, Diego Madrigal aprovechó un gran centro de Esteban Ramírez para poner el 2 a 1. El tanto parecía lapidario para Limón, porque los verdiblancos aunque buscaron el marco contrario chocaban siempre con la defensiva reforzada impuesta por José Giacone.
Ricardo Allen, estratega limonense, incluyó en su nómina a todos los delanteros disponibles: Yauycell Wright y Mynor Escoe, pero Carlos Méndez no tuvo incomodidades hasta que llegó una acción en táctica fija.
La diana limonense de Roy Smith enloqueció el banquillo caribeño. Los limonenses con más ganas que fútbol encerraron a Sporting en los últimos minutos, mientras el contrincante se defendía como podía para evitar el gol que los pusiera en la categoría de ascenso.
José Giacone gritaba ya sin voz a sus muchachos que mantuvieran el orden en defensa, el timonel no quería complicaciones y solo jugadas seguras. Los dirigidos por Allen apelaron en los últimos 10 minutos al juego directo; esto provocó que Carlos Méndez actuara como una especie de líbero y saliera por cada acción dividida en su área.
Sporting logró sostenerse con agallas en la Primera División, poco importó la fineza en los rechaces; lo importante era alejar los balones de la defensiva propia, por lo que los pelotazos fueron de un lado al otro durante los últimos cinco minutos.
Al final, el equipo que descendió fue Limón, un conjunto que no pudo rendir en la temporada en la que no tuvo atrasos salariales.