Si la versión de Fuerza Herediana es cierta, el fallo del Comité de Licencias es un ridículo. Después de 6 meses de “investigación”, dicta una resolución con base, únicamente, en lo que los investigados han aceptado como actos indebidos.
Lo patético es que para determinar esas infracciones al reglamento de licencias no hacía falta esa larga espera y, mucho menos, una auto-inculpación de los señores de la sociedad que administra al equipo florense.
Que Pablo Salazar, asistente rojiamarillo, fue nombrado como tesorero de Fuerza Griega fue un hecho irrefutable. Para constatarlo bastaba con ver la página del Registro Público, o la publicación de La Nación del 6 de abril, que contenía ese detalle.
Y el cumplimiento tardío y omiso de la información entregada por Fuerza Herediana al Comité es un hecho concretado desde el día siguiente del plazo otorgado para aportarla. No había forma de negar algo que constaba sin discusión en el expediente.
La escueta resolución del Comité de Licencias no dice que se haya liberado de responsabilidad a los investigados por unos temas y castigado por otros. Solo dice que Fuerza Herediana aceptó haber infringido el Reglamento de Concesión de Licencias y que no pueden referirse al fallo por un asunto de confidencialidad.
Pues ya Fuerza Herediana los volvió a vacilar. Porque ha revelado los supuestos motivos de la pena impuesta, cuando dicha sociedad está sujeta a la misma obligación de privacidad. Pero, además, los ha dejado en ridículo: ¿Cómo entender que la “investigación” haya tardado 6 meses y necesitó de la aceptación de los infractores de dos hechos innegables, para poder dictar un fallo?
¿Si eso es cierto, por qué La Asociación Deportiva Grecia fue sancionada? Pablo Salazar no fue nombrado en la Asociación, ni esta tiene nada que ver con la información tardía entregada por los heredianos.
¿Qué pasó con el tema del ingreso de dineros al equipo, provenientes del fútbol a través de la sociedad Lajaf, de Jafet Soto, sin estar reportada ante Licencias como un ente autorizado para ello?
¿Por qué la licencia de Grecia fue suspendida en el torneo pasado, después de que, cumplido el mes para aportar la información solicitada por el Comité, no pudo hacerlo, mientras que Herediano estuvo ahora 6 meses en la misma situación y sin un solo día de suspensión?
¿Y por qué si el fallo amenaza con suspensión en caso de reincidencia, no se toma en cuenta que hace apenas unos meses Grecia estuvo suspendida y volvió a cometer una violación al reglamento?
¿Por qué si Orlando Moreira, Jafet Soto, Pablo Salazar y Cristian González están castigados por el Comité de Ética por hechos relacionados con la venta de acciones de Fuerza Griega a Jafet Soto y con pagos de Moreira, el fallo de Licencias no menciona el tema como comprobado o descartado?
El año de castigo del Comité de Ética a Jafet, Moreira, Salazar es indicativo de una violación grave a las normas. La sanción monetaria en Licencias dice otra cosa. Las preguntas sin contestar generan una gran duda: ¿Fue un castigo pactado? ¿O alguien con poder en la Federación, asustado por una posible represalia desde la Ciudad de las Flores, metió mano en la decisión? Tal vez algún día lo sabremos.
Lo que sí es un hecho es que “la investigación” nunca terminó. El 7 de julio estaba pactada una audiencia para recibir el testimonio de los investigados, entre ellos el mexicano Jose Luis Fernández, Jafet Soto y Orlando Moreira. También ese día, en la tarde, iríamos como testigos el periodista Antonio Alfaro y el suscrito.
A solicitud de Fuerza Herediana, la audiencia se suspendió. Y nunca se reprogramó. El secretismo que asume el Comité, no así los castigados, impide saber lo que se cocinó a lo interno para que el fallo fuera consecuencia de una investigación y no de una aceptación de cargos menores.