En esta lista no hay un solo futbolista consolidado y tampoco está repleta de novatos que mostraron destellos. Es una evaluación de aquellos jugadores de los que se esperaba poco o nada en este torneo, y al final se convirtieron en piezas clave de sus equipos.
Algunos subieron su rendimiento con ayuda del buen funcionamiento colectivo; es decir, los resultados y el buen trámite del plantel, les favoreció para lucirse individualmente. Y en otros casos, tienen el mérito de destacar, aun sin un engranaje sólido y solvente.
En este top 10 no se incluyeron extranjeros, ante la premisa de que todo foráneo que llegue al país tiene la responsabilidad de destacar y ser un jugador sobresaliente.
1. Keysher Fuller, lateral derecho de Grecia
El carrilero derecho es una de las armas más efectivas del ataque de Grecia. Rápido y espigado, el jugador se suma a la ofensiva como un volante más y luego regresa a su puesto natural para darle salida al equipo.
Suele llegar hasta la línea de fondo para lanzar centros, pero también tiene la capacidad de cerrar en el área para terminar la jugada en un remate.
Fuller se ve beneficiado por el esquema de Wálter Centeno, que le da total libertad de sumarse al ataque y descuidar sus funciones defensivas. Es difícil evaluar si defiende mal, pues la propuesta griega lo obliga a abandonar su zona con enorme frecuencia.
La velocidad le permite recuperar rápido y regresar a la banda. En esta campaña acumula 17 partidos como titular, siendo uno de los hombres más regulares de su club.
2. Allan Cruz, volante de Herediano
Incluyo en la lista a un jugador que no es indiscutible en su club por una sencilla razón: Se convirtió en un relevo habitual dentro de la mejor planilla del torneo y le roba protagonismo a futbolistas con más colmillo y recorrido.
Es el caso de Allan Cruz, quien llegó al Herediano con un perfil bajo y terminó adaptándose con bastante rapidez al engranaje de Hernán Medford. Es valiente y sacrificado en la marca, y también tiene capacidad para distribuir el balón y proyectarse al ataque.
Con Rándall Azofeifa y Esteban Granados como estandartes del mediocampo florense, se veía complicado que Cruz pudiera ganar protagonismo, pero ciertamente apareció como un bálsamo dentro de la propuesta rojiamarilla.
Mérito para Jafet Soto, que apostó por él y ahora parece ser uno de los fijos dentro del relevo generacional florense. Cruz ha disputado 16 partidos en esta campaña.
3. Ian Smith, lateral derecho del Santos
Con 19 años y un futuro prometedor, el lateral derecho Ian Smith regresó al país para pelear por un lugar en el once del timonel Johnny Chaves.
Smith es rápido y tiene capacidad para proyectarse al ataque, armas que le permiten destacar en el juego ofensivo de los guapileños.
En esta campaña suma 14 partidos, más los duelos disputados en la Liga Concacaf, en donde fue uno de los jugadores regulares del club que afrontó la final del torneo del área.
Después de disputar el Mundial Sub-20 de Corea del Sur y de estar un año a préstamo en el Hammarby de Suecia, Smith regresó al Santos, en donde ya es un jugador regular.
4. Dylan Flores, volante de Cartaginés
La contratación de Dylan Flores fue una de las pocas decisiones acertadas de la dirigencia de Cartaginés en esta campaña. Después de pasar sin pena ni gloria por el balompié de Portugal, el volante regresó al país con la consigna de, al fin, consolidarse.
Quizás, la apuesta brumosa se percibía arriesgada en un principio, pero en los partidos siguientes el mediocampista demostró que con regularidad, puede ser una pieza clave.
Habilidoso y con capacidad de transformar una jugada común en un pase de gol, Flores encontró en Cartaginés el espacio para desarrollarse. Llegó de último, pero rápidamente se ganó la titularidad y ya suma 12 partidos disputados y cuatro anotaciones.
Dylan Flores llegó a Cartaginés con un perfil bajo, pero ahora da la impresión de que podría ser un jugador sobresaliente si mantiene la regularidad.
5. Esteban Rodríguez, volante de Grecia
Después de disputar el Mundial Sub-20 de Canadá y compartir el mediocampo con Celso Borges, se presagiaba que Esteban Rodríguez podía llegar a ser un jugador destacado.
Sin embargo, la irregularidad le cobró factura y pasó de debutar en Primera con Alajuelense a rondar por varios clubes de la división de honor sin pena ni gloria. Fue en Grecia, su ciudad natal, en donde Rodríguez recuperó la esencia de su fútbol.
Fue pieza vital en el ascenso griego y ahora es, junto a Michael Barrantes, el hombre que lleva los hilos del juego en el equipo de occidente.
La propuesta de toque de los griegos favorece a este volante mixto de buena técnica y excelente remate de media distancia, que ya acumula 12 partidos jugados, después de perderse parte de la primera vuelta por una lesión.
6. Bryan Rojas, delantero de Carmelita
Habilidoso y con capacidad para moverse dentro del área, el delantero verdolaga es una de las jóvenes promesas formadas en la Academia Wílmer López.
Aunque le costó afianzarse en el once, en el seno carmelo era visto como un jugador con la capacidad para despuntar en cualquier momento. En esta campaña acumula 17 partidos disputados y cuatro anotaciones.
Rojas formó parte del proceso de Marcelo Herrera que disputó el Mundial Sub-20 de Corea del Sur; sin embargo, quedó fuera de la lista final.
En este campaña se lució frente a Alajuelense y asumió un rol protagónico, después de la salida de Andy Reyes, la otra figura de la cantera, al balompié de México.
7. Luis Diego Rivas, portero de Cartaginés
Después de ser la figura del alto rendimiento de Cartaginés en la última final, el timonel Javier Delgado decidió darle la oportunidad de ser el segundo portero del equipo, detrás de Marco Madrigal. Y Luis Diego Rivas superó todas las expectativas.
El joven portero ya suma 15 partidos como titular y actuaciones destacadas que han salvado a su equipo de una catástrofe aún peor en esta temporada.
Rivas es un cancerbero con buenos reflejos y que comete pocos errores de bulto. La concentración es uno de los aspectos que sobresalen en este joven jugador, que al igual que el delantero carmelo Bryan Rojas, se quedó fuera del último Mundial Sub-20.
En medio de la crisis blanquiazul, al menos se presagia un futuro prometedor con la presencia de Rivas y del talentoso volante Christopher Núñez, otra figura de la cantera.
8. Johnny Gordon, volante de Limón
Johnny Gordon es el equilibrio en el equipo de Horacio Esquivel. Después de cumplir un rol secundario durante varias campañas, en esta oportunidad se afianzó en el once para convertirse en un hombre clave dentro del engranaje caribeño.
El volante mixto cumple un papel fundamental en la marca y la distribución del balón, aunque sus características físicas le permiten sumarse al ataque con frecuencia.
Esto le ha permitido acumular seis anotaciones en esta temporada y 18 partidos como estelar. Ciertamente el futbolista ha mostrado una evolución en su juego, que lo hizo pasar de ser un cambio habitual, a uno de los inamovibles en el esquema limonense.
A sus 26 años, Gordon aprovecha su fortaleza física para marcar diferencia. Mantener la regularidad y la constancia en su juego, es el gran reto del mediocampista.
9. Luis Carlos Barrantes, volante de Pérez Zeledón
Las virtudes del mediocampista generaleño se adaptaron a la perfección al esquema de José Giacone. Sacrificado en la marca y con buena técnica para controlar y tocar el balón, Luis Carlos Barrantes ha entendido su rol, para convertirse en un fijo de Pérez Zeledón.
El volante tiene un fútbol efectivo. Entrega rápido la pelota, pero con precisión, se suma al ataque y transforma sus jugadas en acciones de gol. En esta campaña, ha venido de menos a más para apoderarse de un cupo en la oncena titular.
Barrantes, de 26 años y formado en la cantera generaleña, ha disputado 15 partidos como titular y tiene dos anotaciones.
El mediocampista es parte de un plantel en el que predomina el funcionamiento colectivo y no las individuales. En este momento, Pérez Zeledón es tercero en la tabla de posiciones.
10. Darío Alfaro, defensor de Alajuelense
En medio de la crisis rojinegra, resalta un futbolista de perfil bajo y que, al principio de la campaña, estaba destinado a cumplir un rol secundario en el club.
Se trata del juvenil Darío Alfaro, quien superó a todos los débiles refuerzos de la Liga para ganarse un lugar en el once. Pese a cometer algunos errores en las últimas fechas, también ha demostrado carácter para plantarse en la zaga manuda.
Es rápido para ser central, tiene buen juego aéreo y muestra personalidad, lo que quizás más extraña esta Liga, tan escasa de jugadores capaces de levantarse de la adversidad.
Alfaro tiene 16 partidos como estelar y dos anotaciones en esta temporada. Da la impresión de que en la siguiente temporada, podría ser un hombre fijo.