De Patrick Pemberton hay un antes y un después en la última campaña. El arquero de 36 años titubeó con tanta frecuencia en las primeras cuatro jornadas que acabó por perder su puesto, como resultado de dos victorias y dos tropiezos, y siete goles en contra.
Carmelita le anotó tres veces; Cartaginés, dos; Pérez Zeledón y Grecia, en una ocasión. Su arco no quedó en blanco en el flojo arranque y Luis Diego Arnáez desafió al veterano ‘inamovible’ al enviarlo al banquillo en detrimento de Mauricio Vargas, un joven que aún no es garantía.
Cuando más parecía que la era Patrick daba tumbos y muestras de debilidad, el arquero se reencontró nueve jornadas después, a razón de los constantes errores de Vargas, marcado por fallos de bulto que se convirtieron en tendencia y le abrieron el paso al regreso del mundialista.
Es aquí donde nace el ‘después’ de Pemberton en el torneo; disputó 17 partidos al hilo, en cuenta una semifinal ante San Carlos. Evidenció una mejoría notable, pocos fallos graves, pero sin acercarse al arquero que se adueñó de la puerta eriza en la última década, con enorme repercusión en los títulos conseguidos en la era de Óscar Ramírez.
Con 36 años, Pemberton aún está en edad para defender su portería. Contrario a otros puestos, el arco premia la seguridad que dan los años, lo que permite extender la carrera.
La Liga no se la jugó. En medio de los titubeos de Pemberton, la inseguridad de Vargas cuando fue puesto a prueba y la lejana consolidación de la promesa Adonis Pineda, de buen ver en algunos momentos, apostó por un arquero de talla europea con raíces moradas para convertirlo en el fichaje estrella del Centenario.
Hace solo tres años, Alvarado visitaba el Johan Cruyff Arena, casa del Ajax de Ámsterdam, y salía ileso. Su exequipo, el AZ Alkmaar, derrotó 1 por 0 al club anfitrión, con el tico como estelar.
Hoy, el meta de 29 años se prepara para pelear con Patrick por un lugar en el once, aunque sus atestados y la agresiva contratación manuda, que apostó por su fichaje contra todo pronóstico, hacen pensar que hay poco espacio para las dudas: Alvarado se proyecta para ser el estelar en el torneo venidero.
"La contratación de Alvarado lo que hace es acabar con las penurias. Debe haber sufrido mucho el cuerpo técnico, más allá de que Patrick terminó bien. La Liga tuvo buenos resultados, pero la sensación que da es que en ningún momento sintieron plena seguridad en el departamento de arqueros", recalcó el técnico Eduardo Méndez.
El entrenador recalca la necesidad rojinegra de levantar la copa y la repercusión que adquiere el portero en las fases decisivas, cuando una actuación puede definir el título. En el escenario actual, Alajuelense no puede dudar en ninguna línea, y menos en la portería.
La Liga firmó al espigado cancerbero cuando aún no había realizado un fichaje de verdadero peso, a las puertas de los 100 años del club y con la obligación de conseguir la corona número 30; antes presentó al joven Ariel Lassiter, delantero y volante ofensivo de bajo perfil en la MLS que, por lo visto, aún deja dudas; y a Anthony López, un joven creativo que se encontraba a préstamo en Pérez Zeledón y regresó al club erizo después de un crecimiento más que notable en su desempeño.
Y luego a Henry Figueroa, un central hondureño llamado a recomponer el eje central de la zaga, la zona más criticada en la última campaña. Justo cuando la Liga necesitaba un golpe que levantara la moral de la feligresía manuda, después de otro torneo sin conseguir el título, apareció el fichaje de Alvarado.
“Desde mi percepción, la dirigencia de la Liga está apostando al campeonato al llevar jugadores de peso para crear una competencia. Lo que se debe tener es cuidado, porque en lugar de crear una competencia, generar una rivalidad”, explicó el arquero manudo, Álvaro Mesén.
Según Mesén, la Liga posee dentro de sus filas a dos porteros con características opuestas. Quiere decir que Alvarado puede funcionar y rendir mejor en cierto estilo de juego, a diferencia de Pemberton, que cumpliría a cabalidad con otro sistema y propuesta.
Por ejemplo, el excancerbero cree que Alvarado funciona mejor cuando su equipo aplica un bloque cerrado, mientras que Pemberton resulta más funcional en los duelos en los que la Liga tenga que salir a proponer. ¿Por qué Mesén cree esto?
“Esteban es un portero que cubre mucho espacio cuando se juega con un bloque y suele haber mucho fútbol aéreo. Él cubre muy bien los ángulos de disparo. Por sus características físicas, los desplazamientos le cuestan un poco más. Patrick es muy rápido en los desplazamientos. Eso ayuda cuando se tiene un equipo muy abierto y te contragolpean”, agregó Mesén.
Desde tiempo antes se esperaba que Alajuelense respondiera con un golpe en el mercado, pero todo hacía indicar que el escenario no sería sencillo. A Daniel Colindres, a todas luces pretendido por el club manudo, aún le restan seis meses de contrato en Bangladés y lo quieren otros dos equipos nacionales, Herediano y Saprissa.
Marco Ureña, canterano manudo, es representado por Kurt Morsink, que tiene una muy mala relación con la dirigencia eriza, aunque el presidente Fernando Ocampo reconoció el interés en repatriar al delantero. La S también aspira a contratar al artillero y, de irse Johan Venegas al fútbol internacional, su llegada podría tomar fuerza.
Antes la Liga también negoció con Carmelita para llevarse al mediocampista de ataque Suhander Zúñiga y al delantero Bryan Rojas. El primero firmó con Saprissa y del segundo se conoce que posee una oferta en el exterior, y otra del club morado.
Luego de llenar algunas de las necesidades básicas del club, con la llegada de Figueroa y López, a la dirigencia le faltaba el fichaje ‘estrella' del Centenario.
El cuidapalos apareció en un momento clave, pues aún cuando las críticas más fuertes se dirigían a la retaguardia y no a portería, al final Alajuelense contrató a un jugador con perfil europeo, en una posición algo desgastada en la Liga.
Alvarado, que se despidió de Costa Rica muy joven, luego de ganar el Guante de Oro como mejor portero del mundial Sub-20 de Egipto 2009 y firmar con el AZ Alkmaar holandés, es visto como un relevo natural para Keylor Navas (32) en la Sele y al mismo tiempo como una garantía para la Liga en el corto y mediano plazo, si es que continúa en el país, pues existe la posibilidad de que salte al exterior antes de finalizar su vínculo con los manudos.
Pemberton insiste en que la competencia siempre ha existido en el club rojinegro, aunque es evidente que ni Vargas ni Pineda tenían los atestados de Alvarado y menos su experiencia.
"No me sorprendió la contratación. La directiva hace su análisis y aquí lo más importante es que Esteban llega a sumar. Nadie es más que nadie", afirmó Pemberton.
Alvarado dividió su formación entre la cantera del Santos de Guápiles y la del Saprissa, en donde trabajó al lado del hoy entrenador de porteros morado, Róger Mora.
Luego de partir a Holanda en la temporada 2010, participó regularmente con el AZ hasta el 2016; luego brincó al Trabzonspor de Turquía, en donde fue a parar al banquillo durante la mayoría del tiempo; dos temporadas más tarde, aspira a recuperar el ritmo de juego en suelo tico.
Alvarado repite el discurso de Pemberton e insiste en que la competencia mejorará el desempeño de ambos guardametas.
“Tengo que venir a pelear por el puesto, yo nunca le huyo a la competencia", afirmó.
A falta de que llegue el pase internacional del nuevo fichaje, Pemberton empezará la campaña como titular. Este podría ser el principio del fin de una era en el arco erizo.