El uruguayo Alejandro Larrea, quien fue asistente del técnico Óscar Macho Ramírez en el Mundial de Rusia 2018, clasificó este sábado a Puerto Golfito a la final del Torneo de Apertura 2019 de la Liga de Ascenso.
Los golfiteños derrotaron 2-0 como visitante a Juventud Escazuceña, luego de igualar 1-1 en Río Claro la semana anterior. Ahora esperan al vencedor de la serie entre Sporting FC y el Municipal Garabito este domingo en el estadio Colleya Fonseca. Los capitalinos van arriba 1-0 en la serie.
Otrora goleador del Saprissa, Larrea realizó un planteamiento muy táctico, dónde anuló las fortalezas de su adversario, luego de analizar muy bien al rival.
El charrúa no ocultó que gran parte de su propuesta se basó en su experiencia al lado del Macho Ramirez, con quien fue compañero en el cuadro morado, tanto como jugador como en el cuerpo técnico, así como en el Santos de Guápiles cuando ascendieron al club y en la Selección Nacional en la Copa del Mundo de Rusia.
“Óscar es gran parte de lo que uno proyecta (como entrenador). Hemos entendido lo que fue Saprissa en 2003 y 2004 con Hernán (Medford). Evidentemente trabajábamos con los jugadores, nos entendíamos muy bien. Óscar fue campeón en todos los equipos que dirigió y tiene una manera diferente de ver el fútbol, donde todos marcan, todos llegan. Eso fue lo que nosotros vemos en la situación táctica de un equipo en una cancha; es el reflejo en parte de lo que hicimos en la Selección", comentó Larrea.
El compromiso fue trabado, con una ardua disputa en el mediocampo, con muchas faltas, por lo que ambos conjuntos trataron de imponerse en el juego aéreo.
Sin embargo, los golfiteños lograron ponerse arriba en el marcador cuando Daniel Vargas filtró un balón a Geovannie Cantillano, quien se quitó un defensa y remató suave ante el achique del arquero Minor Álvarez, para marcar el 0-1 al minuto 22.
En el complemento los josefinos trataron de avasallar la portería de los porteños, pero rápidamente los visitantes sentenciaron el compromiso cuando fue derribado dentro del área Henry Cooper.
El mismo Cooper fue el encargado de cobrar y aunque Álvarez logró rechazar el remate del limonense, el rebote lo tomó Henry y de cabeza marcó el 0-2 definitivo.
Los escazuceños intentaron reaccionar, pero abusando del pelotazo, lo cual fue controlado por la zaga porteña, de mayor altura y fortaleza física, por lo que lograron sellar su boleto a la final del Apertura.