Deseo aprovechar este artículo para hacer algunas precisiones en torno a la noticia presentada el pasado viernes 15 de febrero referente al proceso de regularización migratorio que lleva adelante actualmente la Dirección General de Migración y Extranjería, en el cual se señala que Migración legalizó a 60.000 extranjeros pero no alcanzó la meta.
Sobre este particular, en efecto, para la fecha del 1.º de febrero pasado el total de personas que se han documentado mediante este proceso han sido 62.783 personas; sin embargo, tenemos actualmente a otras 27.237 personas con cita en firme para ser atendidas en el marco de los transitorios, lo cual, eventualmente, elevaría la cifra de personas documentadas a 90.020.
Por otra parte, es importante apuntar que, tal y como lo señala la nota periodística, el periodo de recepción de los transitorios aún no ha terminado, dado que será hasta la fecha del 19 de abril, cuando cierre el periodo de recepción, que se sabrá con claridad el número completo de personas extranjeras beneficiadas.
Por lo tanto, es impreciso decir a este momento que la meta final no se alcanzó.
Al inicio del proceso de los transitorios, la Dirección General de Migración y Extranjería buscó establecer un parámetro posible de la cantidad de personas indocumentadas que se verían eventualmente beneficiadas con esta medida.
Para tales efectos, se estimó una población posible de 100.000 personas, al recurrir a las estimaciones que para tal fin emite el Banco Mundial en adición a los resultados del Censo del 2011.
Sin embargo, dicha estimación es eso, una estimación, dado que la contabilidad de la irregularidad migratoria constituye un reto para todos los Estados receptores de flujos migratorios.
Por tanto, es muy positivo para el Estado costarricense y la Dirección de Migración el número posible actual de personas documentadas de 90.020, lo cual significa que nos estamos acercando al estimado planteado.
Los transitorios migratorios, como proceso aún concurrente, han constituido efectivamente un reto importante para llevar la información a todas las poblaciones; hablamos principalmente de los retos que implica motivar a las poblaciones vulnerables con limitadas competencias educativas, lo cual implica la necesidad de crear medios de comunicación alternativa.
Se creó por ejemplo el Programa de Rutas de Integración para paliar esta situación, traduciendo los trámites migratorios en juegos recreativos y llevándolos a las comunidades rurales y urbanas a través de las redes locales.
Lo cierto del caso es que los beneficios de la documentación migratoria no solo se pueden contabilizar a partir de la cantidad de personas documentadas, sino, más bien, a través de los beneficios sociales integrales que implica dicha documentación.
Ahora sabemos, por ejemplo, que al día de hoy hay 62.783 personas extranjeras que tributan a la Caja Costarricense del Seguro Social, con capacidad de abrir cuentas bancarias y movilizar la economía nacional.
Además, contaremos posiblemente con más de 30.000 personas que se adicionarán a las anteriores, constituyendo todo esto un éxito para el desarrollo económico y social de nuestro país.