La esquina sureste entre calle 8 y avenida 7, ubicada cerca de la entrada de barrio México, por el Paso de la Vaca y contiguo a la Terminal 7-10, fue tomada como taller mecánico al aire libre.
Por ahí camina mucha gente hacia sus lugares de trabajo, de paseo o para efectuar otras actividades. Por lo tanto, pasar por el taller mecánico significa un gran peligro, pues los peatones deben transitar por la calle. Para evitar accidentes, solicito la intervención de la Municipalidad de San José.
Elías A. Esquivel Salas, barrio México
Derecho de respuesta
Respecto a la carta de José F. Chacón Mendoza, publicada el 17 de abril y titulada “Operación en el INS”, aclaramos que Chacón ha sido atendido en nuestra red de servicios de salud, ya que, efectivamente, como resultado de un accidente, presenta una lesión en la mano derecha. Hemos dispuesto todos los recursos especializados para brindar una atención enfocada en su pronta y adecuada recuperación; sin embargo, existen criterios médicos de diferentes especialistas sobre la gravedad de las lesiones, las cuales pueden dejar secuelas.
Por esta razón, se le brindó una cita denominada valoración de daño corporal, en la cual se valida la gravedad de las secuelas y las indemnizaciones cuando correspondan. Las citas se asignan con un plazo de 6 a 9 meses posteriores a la última valoración del paciente. Se prevé que en ese periodo las lesiones hayan evolucionado de manera tal que puedan considerarse permanentes o no.
El plazo empezó a correr el 9 de abril, cuando se solicitó la reapertura del caso, por lo que automáticamente se reprogramó la cita de valoración de daños para cumplir nuevamente con el tiempo de consolidación de lesiones.
Isabel Cristina Solís, encargada de la Unidad de Prensa
Mala administración
Quienes cotizamos para el Régimen Obligatorio de Pensiones no podemos disponer del fondo porque no sabemos manejar nuestro dinero, se supone que las operadoras de pensiones complementarias sí. Pero se permite a los bancos repartir a diestra y siniestra tarjetas de crédito a gente que verdaderamente no las saben usar. Entonces, ¿quiénes sí tienen capacidad para administrar el dinero?
Luis F. Bruno Guzmán, San José
Estrategia injusta
Muchas veces debemos hacer lo que cada banco desea. Resulta extraño que, pese a todas las quejas que a menudo oímos sobre la banca, no se hayan tomado medidas para proteger también a los usuarios. Algunos bancos pagan intereses sobre el saldo de las cuentas corrientes, no todos. Otros aplican lo de “si te vi, no me acuerdo”.
Si tenemos un préstamo, el sistema está programado para hacer el rebajo sin importar la fecha, pero no es lo mismo en el caso de tener un negocio. Cuando hay transacciones por medio de tarjetas, la maquinita no está programada para acreditar en las cuentas de los negocios el dinero de las ventas; se atrasan. Por ejemplo, en Semana Santa, desde el miércoles, guardan el dinero y no se deposita hasta el lunes siguiente. El caso se repite todos los fines de semana.
De esta forma, el banco gana intereses y tal vez el dueño del dinero necesitándolo para hacer frente a sus obligaciones.
Marvin Yglesias Molina, San José
Nuevo impuesto
Al año se queman unas 30 casas en mal estado y cuarterías. El reciente incendio de uno de estos lugares manifiesta la falta de protección para las personas en precarias condiciones. La noticia pasa y el dolor humano y físico queda en “las manos de Dios”.
Una propuesta para dar apoyo en estos casos podría ser pedir mil colones a la clase media y a la más pudiente y depositarlos en un fideicomiso administrado por el INS. Se cobrarían en los recibos de la luz.
Otra opción sería unir los mil colones a todos los seguros de incendios para establecer un fondo que permita construir casas nuevas, atender sepelios y dar una ayuda alimentaria para que los afectados retomen sus vidas. Por supuesto, con la previa investigación del incendio. Ojalá algún diputado tome en cuenta mi propuesta.
Mario Valverde Montoya, San Rafael de Montes de Oca
Casas en curva
Con frecuencia viajo a Turrúcares, distrito del cantón central de Alajuela, y me encuentro con la deprimente vista de tugurios en plena vía pública.
Luego de pasar el río Siquiares, hay una curva muy pronunciada y allí, a vista y paciencia de las autoridades, las construcciones abarcan hasta la cuneta de la carretera. Como tienen luz eléctrica y agua, no imagino cómo la Municipalidad de Alajuela y el ICE autorizaron esos servicios.
Lo más triste de la situación es que por allí transitan obligatoriamente las autoridades municipales y de Policía, las cuales debieron detener desde sus inicios la construcción en la vía pública, especialmente, por ser en una localización de peligro.
Lo más triste de la situación es que por allí transitan obligatoriamente las autoridades municipales y de Policía, las cuales debieron detener desde sus inicios la construcción en la vía pública, especialmente, por ser en una localización de peligro.
Con frecuencia se habla mal del gobierno y de la municipalidad, pero, en este caso, hay que sumar la actitud indolente de los mismos ciudadanos del lugar porque no solo se afecta el ornato, sino también la seguridad vial, y no se toman medidas para solucionar un problema social como el descrito.
Orlando Morales M., San José