El 15 de enero hubo una poderosa erupción volcánica en isla Tonga, Oceanía, con una potencia cientos de veces más fuerte que la bomba atómica de Hiroshima. En la Isla del Coco, hay evidencias de megaerupciones similares a esa.
Una semana después de la catástrofe desencadenada por una erupción volcánica y un tsunami, la población de Tonga está determinada a reconstruir su país donde, a pesar de las complicaciones logísticas y sanitarias, empieza a llegar ayuda humanitaria.
Unas 84.000 personas, más del 80% de la población de las Islas Tonga, se han visto afectadas por la erupción del volcán Tonga-Hunga Ha'apai y el posterior tsunami, aseguró la ONU este miércoles, y agregó que las evacuaciones de las islas estaban en proceso.
Tonga estaba prácticamente aislada del resto del mundo este lunes tras la erupción de un volcán submarino que paralizó las comunicaciones de este país insular del Pacífico.
El volcán Hunga Tonga- Hunga Ha’apai se encontraba bajo del mar a unos 65 kilómetros al norte de la capital de Tonga. Sin embargo, sus recientes erupciones lo hicieron emerger a la superficie y han formado una pequeña isla.
En Alaska, a 10.000 kilómetros, se escuchó un potente rugido, y en Escocia, en las antípodas del volcán, la estación meteorológica de Fife registró un salto en la presión del aire debido a este fenómeno.
Chile alertó este sábado sobre la posibilidad de que llegue a la Isla de Pascua un ‘tsunami menor’ por la erupción de un volcán en Tonga.
La tecnología es una ventana que abre oportunidades y facilita la educación, pero en las manos incorrectas puede ser una amenaza contra nuestros niños y jóvenes.
En 1992, muy cerca de donde se originaron los temblores recientes del Pacífico norte, hubo un terremoto de magnitud 7.6, que activó un tsunami el cual devastó zonas costeras de Nicaragua.
Se registraron 48 muertos y 554 heridos. Epicentro se ubicó en Baja Talamanca, pero destrozos se extendieron por todo el país