Los 560.000 abonados de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) podrían pagar un 6% más en su factura de electricidad si la Aresep aprueba el aumento solicitado por esa empresa.
De acuerdo con la petición presentada ante la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), el aumento regiría del 1.° de octubre al 31 de diciembre de 2020.
Eso implicaría que las familias con un consumo básico de 200 kilovatios hora, pasarían de pagar ¢14.200 a cancelar ¢15.000 por esa electricidad.
Según el expediente del trámite, la Compañía justifica la petición en la necesidad de un aumento del 5,21% para recaudar poco más de ¢20.000 millones correspondiente a “rédito para el desarrollo” aprobado por la Aresep. Insistió en que el cálculo se hizo bajo el principio de “servicio al costo”.
Además, un 0,98% por concepto de “reactivación de la tarifa de media tensión”, servicio que va dirigido sobre todo a empresas, con la idea de colaborar con el Gobierno en la “reactivación económica” al ofrecer mayor “competitividad”.
Como parte del trámite, la audiencia pública se realizó este martes.
La Defensoría de los Habitantes se opone al ajuste tarifario por considerar que no responde necesariamente a “criterios de razonabilidad”.
Incluso, esa institución critica la práctica de Aresep de “forzar los resultados económicos del prestador del servicio a un rédito determinado”, pues, argumenta, introduce rigideces en la política tarifaria.