La Asamblea Legislativa mantuvo la operación normal de uno de sus edificios, en el cual se detectó un empleado del área de seguridad con covid-19.

Se trata de un inmueble por donde pasan, en diferentes momentos del día, entre 100 y 110 personas, en condiciones normales.

El edificio, ubicado al costado norte del cine Magaly, en barrio La California, San José, alberga los departamentos de Psicología, Ujieres, Servicios Parlamentarios y Servicios Generales, del cual forma parte Seguridad.

Justo al frente de este edificio legislativo, está una oficina del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) en donde también fue detectado un caso de coronavirus. El TSE desalojó el inmueble el viernes 3, dos días después de conocerse el caso sospechoso.

Solo el área de Seguridad del Congreo tiene 63 funcionarios, quienes laboran por turnos y se envían a los diferentes puestos de la Asamblea.

La situación se conoció a raíz de una carta enviada al presidente del Directorio legislativa, Eduardo Cruickshank, por la secretaria general de la Unión de Trabajadores Legislativos (Utraleg), Maritza Arias.

Ella cuestionó la falta de información con que se manejó el caso sospechoso.

Las autoridades legislativas conocieron el caso sospechoso el miércoles 1.° de julio y el edificio siguió operando normalmente los días 2 y 3.

“¿Cuáles fueron las razones por las cuales al personal no se le informo en tiempo de la situación?”, cuestionó Arias en su nota.

En la respuesta a la vocera de Utraleg, el médico del Congreso, Wálter Rodríguez, adujo que no había razón -según los protocolos del Ministerio de Salud- para que la población no laborara esos dos días.

La prueba del funcionario de coronavirus del funcionario dio positiva el fin de semana.

La vocera sindical añadió que la situación generó temor entre los empleados, pues se enteraron del asunto a través de la prensa y no por los medios oficiales internos.

“Una de las medidas que se debieron tomarse desde el miércoles era mantener en cuarentena a todo el personal de ese edificio, porque hoy se sienten angustiados”, relató Maritza Arias.

Médico del Congreso: ‘Casos se manejan con discreción y secreto profesional'

Ante los reclamos de Maritza Arias por el manejo sigiloso de la información, el médico del Congreso adujo que, luego de conocer que un hijo del funcionario de seguridad era positivo con covid-19, se informó a las autoridades administrativas y sanitarias, así como a siete compañeros que tuvieron contacto el empleado.

“Con el nivel de angustia y ansiedad que hay a nivel nacional e institucional, estos casos se manejan con la mayor discreción y bajo las normas del secreto profesional. No había razón para hacerlo público; el caos hubiese sido mayor y las medidas sanitarias se tomaron en tiempo y forma”, informó el médico.

Ante presión de los medios, la Asamblea reconoció el jueves 2 de julio que había dos casos sospechosos. Los resultados de ambos se conocieron el sábado 4: una asesora socialcristiana dio negativo, mientras que el empleado de seguridad resultó positivo.

Al oficial de seguridad solo le resta un año para jubilarse y, además, tiene factores de riesgo, pues padece diabetes e hipertensión.

Además del caso positivo en el agente de seguridad, entre mayo y junio se detectaron seis casos positivos entre los empleados de la construcción del nuevo edificio de la Asamblea, el último de ellos hace una semana.

Limpieza a fondo

El médico legislativo aseguró que se coordinó con los funcionarios del Congreso y la empresa privada que da servicios de limpieza para hacer una desinfección a fondo, con cloro, en todos los puestos en que habría laborado el agente.

Además de estar en el edificio de barrio La California, el funcionario contagiado estuvo en el edificio de Los Yoses, donde se encuentran departamentos como Archivo, Biblioteca y Servicios Técnicos, entre otros, por donde generalmente pasan 150 empleados legislativos.

Antonio Ayales, director ejecutivo del Congreso, aseguró que la mayoría de trabajadores de Servicios Técnicos están en teletrabajo, por sus funciones de análisis de proyectos.

También dijo que, tanto en la UAM como en el edificio que está en Los Yoses, muchos funcionarios están, a partir de este lunes, de vacaciones.

Según el médico, la limpieza se realizó tanto en el edificio de Los Yoses como en La California. Rodríguez adujo que este lunes se realizó un refuerzo en la sanitización de varios puestos y comedores.

Para jueves y viernes de esta semana, se programó una limpieza general de toda la Asamblea Legislativa, apuntó el médico legislativo, y se programó una fumigación para los días 24 y 25 de este mes.

Reclamo a diputados

En la carta de la secretaria del sindicato también se lanzó un reclamo a los diputados, quienes se autorizaron vacaciones entre este lunes 6 y el viernes 10, pues alegó desprotección de los funcionarios frente al riesgo de contagio del covid-19.

“Las noticias salidas de la institución, que se emiten sobre el tema, van dirigidas en la protección de ustedes los diputados y diputadas, y se olvidan de las personas funcionarias que laboran en la institución”, dijo la vocera del sindicato parlamentario.

El argumento de los legisladores para apoyar el receso fue, en parte, que buscaban proteger de contagios a los legisladores y la población de empleados legislativos; también dijeron, en la moción aprobada, que vienen trabajando ininterrumpidamente desde que inició la emergencia de la pandemia.

La mayoría del personal del Congreso debe seguir laborando y solo puede irse de vacaciones si tiene días acumulados, de períodos anteriores.