Ocho créditos internacionales contratados por el gobierno de Carlos Alvarado y refrendados por los diputados, entre octubre del 2019 y diciembre del 2021, le ahorraron a la Hacienda Pública $89 millones gracias a un menor pago de intereses. El monto equivale a ¢58.000 millones, cuatro veces el costo del nuevo paso elevado que se construye en la rotonda de la Bandera, en Montes de Oca.
Así se lo comunicó la contralora general de la República, Marta Acosta, a los diputados de la Comisión de Asuntos Hacendarios de la Asamblea Legislativa, cuando acudió a exponer su criterio sobre dos nuevos créditos externos por $470 millones.
“La Dirección de Crédito Público (de Hacienda) estima preliminarmente que estos créditos han generado un ahorro de pago de intereses desde 2019 al 2021 que alcanza unos $89 millones”, indicó la jerarca el martes.
De acuerdo con la Contraloría General de la República (CGR), los ocho empréstitos que han generado los ahorros suman $2.596 millones.
Los ahorros obedecen a que estos créditos internacionales tienen tasas de interés más bajas de lo que cobran los compradores de bonos de deuda interna, así como mejores plazos de pago. Cuando el Gobierno obtiene estos recursos, evita acudir al mercado interno.
Se trata de préstamos con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que suman ¢830 millones, así como $500 millones otorgados por el CAF (banco de desarrollo de América Latina), $151 millones de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), $815 millones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y $300 millones del Banco Mundial.
Hacienda ha logrado pagar, en los créditos externos, tasas de 1,18% en dólares, por ejemplo.
En cambio, las tasas de un préstamo en dólares en el mercado local oscilan entre 6,07% y 9,39% que son los porcentajes con los cuales ha colocado deuda interna el Gobierno a plazos de cinco o 10 años.
La contralora general explicó que, si bien los créditos externos conllevan el riesgo de afectar el tipo de cambio del dólar, brindan al Gobierno nuevos recursos que lo ponen en una mejor posición en el mercado interno, ademas de reducir las tasas de interés local.
Por otra parte, Acosta resaltó las condiciones favorables de dos créditos contratados por el Gobierno que actualmente se discuten en Hacendarios. Uno por $300 millones con el Banco Mundial (¢193.728 millones), y otro de 150 millones de euros (¢110.764 millones) con la AFD.
Sin embargo, con el fin de lograr estabilidad fiscal, “se debe hacer un uso eficiente del gasto y cumplir a cabalidad con las herramientas previamente definidas como lo es la regla fiscal”, según advirtió.
Además, Acosta llamó al Poder Ejecutivo a minimizar la exposición al riesgo cambiario con la entrada de esos recursos, e instó al Gobierno a conciliar la deuda con la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), pues, de cada crédito externo adquirido en el 2020, se destinan el 10% al abono de la deuda del Estado con la seguridad social.
Estos giros cuentan como gasto corriente del Presupuesto Nacional, lo que incide en el cumplimiento de la regla fiscal, según Acosta.
La jerarca dijo que, al 31 de octubre de 2021, la deuda reconocida por parte de la Contabilidad Nacional alcanza los ¢346.840 millones, con un incremento de ¢155.362 millones (81,1%) respecto al 30 de junio 2021.
En tanto, la CCSS contabilizaba ¢2,4 billones. “La tasa de crecimiento anual de esta última cifra en los últimos años es de dos dígitos, por lo que la Contraloría llama la atención, una vez más, sobre la necesidad de conciliar y realizar los registros que correspondan con el fin de que se tomen medidas para dar sostenibilidad a las finanzas públicas”, instó Acosta.