Anuncios de aires acondicionados, llantas, hoteles, agencias que rentan vehículos... todos los rótulos que estén ubicados entra la empresa Nissan, en Sabana, y la entrada a San Ramón, comenzarán a desaparecer desde este lunes.
Veinte funcionarios del Departamento de Inspección Vial y Demoliciones del MOPT comenzarán a quitarlos como parte de un proceso de recuperación de los derechos de vía, es decir 25 metros a cada lado, contados desde el centro de la carretera.
El trabajo se realizará en dos fases. La primera de la Nissan al cruce de Manolo’s, en La Garita, mientras que la segunda llegaría a la entrada de San Ramón, explicó Vinicio Barboza, jefe de ese departamento.
Se estima que en el primer tramo hay entre100 y 150 rótulos, mientras que en el segundo, unos 200.
“Tenemos rótulos de diferente índole, desde aquellos que se colocaron de manera indiscriminada por distintos sujetos privados, de manera indebida, hasta los que tienen algún vínculo con el Departamento, es decir, empresas que tienen licencias otorgadas”, explicó.
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Aunque el operativo se realiza en cumplimiento de una orden del ministro Rodolfo Méndez, coincide con la reactivación de las gestiones para ampliar el corredor San José-San Ramón, proyecto frustrado luego de que se anulara un contrato de concesión con la empresa OAS, en 2013.
En la zona, solo deben estar los parabuses y los mupis. En otras vías también se han autorizados contenedores de reciclaje.
“Esto conlleva no solo la atención de las competencias que no fue otorgada por el decreto 29253-MOPT en donde el artículo 7 establece que somos administradores del derecho de vía, tenemos que recuperarlo y viene una coyuntura concreta que es el proyecto San José-San Ramón; necesitamos el corredor vial despejado”, añadió Barboza.
La atención de este sector de la carretera Interamericana Norte tomaría unos 15 días. Luego, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) planea llevar el operativo a la ruta 27 (San José-Caldera), la 32 (San José-Limón) y, especialmente, la 34 o Costanera y Guanacaste.
Los rótulos quedan en manos del Departamento por un mes, para que los interesados que quieren recuperarlos lo hagan, no sin antes pagar la multa de ¢420.000, que establece la ley de tránsito.
Si pasado ese plazo, no son retirados, estos se pueden donar o utilizar para obras menores en la institución, pues casi todos son piezas de perling.