De las 2.500 iglesias agremiadas en la Alianza Evangélica Costarricense, solo dan fe de 1.000 que cumplen con los permisos del Ministerio de Salud para operar.
El presidente de la agrupación evangélica, Juan Luis Calvo, aseguró que realizan un esfuerzo para poner en orden los templos y que para ello necesitan el apoyo del Gobierno.
Así las cosas, no hay garantía de que unos 1.500 templos evangélicos cumplan con los requisitos de funcionamiento que estableció el Ministerio de Salud en el reglamento del 2005.
Dicha normativa establece las medidas mínimas de seguridad en cuanto a la instalación eléctrica y en la estructura del templo, así como la garantía de que el ruido provocado por los cánticos y alabanzas no incomode a los vecinos.
Pese al incumplimiento, Calvo considera que debe haber una relación más cercana entre el Gobierno y las iglesias para aplicar el reglamento que establece los requisitos.
Las normas surgieron como respuesta a las protestas que líderes políticos evangélicos realizaron contra una seguidilla de cierres de templos en el 2005.
Para ese entonces, 1.295 templos, de los 1.349 inscritos a esa fecha, carecían de permisos y las autoridades habían cerrado 37.
En protesta por los cierres, en marzo del 2005, el entonces diputado Carlos Avendaño, se subió al Monumento Nacional, a un costado del Congreso, lo que obligó a las autoridades a negociar.
Con la llegada de Óscar Arias al Gobierno en mayo del 2006, se apuró el reglamento que frenó el cierre de templos evangélicos.
El Reglamento para el funcionamiento sanitario de templos o locales de culto, firmado en julio del 2006 por Arias y su ministra de Salud, María Luisa Ávila, establece las normas mínimas de seguridad y accesibilidad para que los templos operen sin ser clausurados.
Voz y voto. Además de establecer las reglas, Arias creó una comisión que velaba por el cumplimiento “estandarizado” de las normas en las diferentes direcciones regionales del Ministerio de Salud.
Esa comisión estaba conformada por el pastor y arquitecto Mario Cortés (corredactor del reglamento), por el viceministro de Salud y el director jurídico de esa cartera.
El foro trabajó durante los gobiernos de Arias y Chinchilla, pero no se ha activado bajo el mandato de Luis Guillermo Solís.
Para Cortés y los diputados de los partidos evangélicos Renovación Costarricense (RC), Restauración Nacional (RN) y Alianza Demócrata Cristiana (ADC), es esencial que la comisión se reactive.
A pesar de la petitoria, en el Ejecutivo no hay ánimo, de momento, para que vuelva a trabajar la comisión. Así lo afirmó la viceministra de Salud, María Esther Anchía, quien enfatizó que ese foro no se va a abrir de nuevo, aunque garantizó que no habrá persecución.