Durante un tiempo pensó en estudiar Medicina para mejorar la salud de las personas. Luego de estudiar otras opciones, vio que son varias las carreras que pueden contribuir con el bienestar de la gente y entre esas Alexa Cerdas Guzmán descubrió Ingeniería en Mecatrónica, campo que le permite desarrollar su pasión por la robótica.
Esta vecina de Grecia, de 17 años y estudiante del Liceo Experimental Bilingüe, llegó a la conclusión de que esa carrera era la puerta para aprender a construir prótesis inteligentes que puedan servir a personas con diferentes condiciones. Por eso, Cerdas celebró este jueves que ya comenzó a cumplir sus sueños, al obtener 794,64 de 800 posibles en la prueba de admisión del Instituto Tecnológico de Costa Rica (Tec), los que la convierten en el tercer mejor promedio de este año.
Con una idea tan definida de lo que quería puso manos a la obra: “hice cursos para ir practicando. Fui guardando cada práctica que me daban y después de cierto tiempo borraba las respuestas y volvía a hacerlas, para ver cómo mejoraba. Trataba de aprender nuevas técnicas para hacerlo todo más rápido y que no me hiciera falta tiempo para terminar”.
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Enfrentarse con el examen, sin embargo, fue de mucha angustia y estrés: “no pude ni comer antes porque estaba mareada de los nervios. Es imposible ir tranquilo. Ni una manzana me pude comer”.
Pasado el examen, relató “fue una de esas situaciones en donde dije ‘o entendí todo o no entendí nada’”. Según recordó, salió temblando de la prueba.
El resultado mostró que sí había entendido todo, al ser no solo el tercer promedio general sino también la mujer con el mejor puntaje en este proceso de admisión.
El momento
Cerdas cuenta que el día en que estuvieron los resultados ella y su mamá se levantaron lo más temprano posible. Sabían que a medianoche la demanda iba a ser mucha y tal vez iba a ser difícil ingresar al sistema, por lo que optaron por madrugar. Les funcionó, pues al momento ya tenían el resultado.
“Fue muy emocionante, porque la verdad no quería otra carrera en otra universidad. Fue de llorar”, narró.
Su plan es, tras concluir los estudios, buscar otras opciones fuera del país para tener más conocimientos técnicos que la acerquen al desarrollo de estos dispositivos para así ayudar al mejoramiento de la calidad de vida de muchas personas.