La Meca. El rey Salmán de Arabia Saudí instó el jueves a los Estados árabes del Golfo a trabajar juntos para afrontarlos “actos criminales” de Irán, durante la apertura de tres cumbres en La Meca dedicadas a las tensiones en la región.
Los “recientes actos criminales de Irán (...) requieren que todos nosotros trabajemos seriamente para preservar la seguridad (...) de los países del CCG” (Consejo de Cooperación del Golfo), dijo el monarca, refiriéndose a los recientes ataques a instalaciones petroleras y oleoductos del Golfo.
“La interferencia del régimen iraní en los asuntos internos de los países de la región, el desarrollo de programas nucleares y de misiles, y sus amenazas a la libertad de transporte marítimo internacional son una amenaza al suministro mundial de petróleo”, sostuvo.
Esa llamada se produjo pocas horas después de que el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton, dijo que es casi seguro que Irán estaba detrás del presunto sabotaje de cuatro barcos, incluidos dos petroleros saudíes, frente a las costas de los Emiratos Árabes Unidos.
Mientras tanto, los rebeldes yemeníes alineados con Irán han intensificado los ataques con drones contra el reino wahabita, uno de los cuales resultó en el cierre temporal de un importante oleoducto.
La reunión de los dirigentes del CCG -Arabia audí, Baréin, Emiratos Árabes Unidos, Omán, Catar y Kuwait- es la primera de tres cumbres convocadas por Riad en un momento en que intenta reunir apoyo contra Irán después de una serie de ataques que han desatado temores de una conflagración regional.
Tras esta cumbre del CCG, tendrá lugar este mismo jueves por la noche una de la Liga Árabe, y el viernes se realizará una de la Organización de la Cooperación Islámica (OCI).
“El apoyo de Teherán a los rebeldes hutíes en Yemen es una prueba de las injerencias iraníes en los asuntos de otras naciones y esto es algo que (...) los países islámicos deben rechazar”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores saudí, Ibrahim al Asaf, a sus homólogos de los 57 miembros de la OCI.
Asaf manifestó que los ataques a las instalaciones petroleras deben ser abordados con “firmeza y determinación”.
Contrariamente a lo que se esperaba, Irán envió una delegación encabezada por Reza Najafi, director general de Paz Internacional y Asuntos de Seguridad en el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Región caliente
La tensión en Oriente Medio se disparó por el ataque a los cuatro barcos.
Irán estuvo “casi seguramente” detrás de los actos de sabotaje del 12 de mayo contra cuatro navíos frente a las costas del emirato de Fuyaira, a la entrada del Golfo, afirmó John Bolton.
Los buques, entre ellos dos petroleros saudíes, fueron blanco de “minas navales, casi seguramente de Irán”, agregó a los periodistas a su llegada a los Emiratos Árabes Unidos.
Irán rechazó “con firmeza” las acusaciones estadounidenses, que considera “ridículas”. “No son sorprendentes unas acusaciones tan ridículas”, declaró este miércoles el portavoz de Relaciones Exteriores, Abbas Musavi.
Estados Unidos participa con otros países en la investigación, dirigida por los Emiratos, sobre esos incidentes que aumentaron la tensión en el Golfo.
“¿Quién más podría hacer eso? ¿Alguien de Nepal?”, preguntó irónicamente Bolton, quien dijo que se iba a reunir con el príncipe heredero de Abu Dabi, Mohamed ben Zayed Al Nahyan, y con su homólogo, Tahnun ben Zayed Al Nahyan para analizar las relaciones bilaterales y las tensiones regionales.
Este nuevo cruce de acusaciones entre Teherán y Washington se produce después de que Estados Unidos reforzase su presencia militar en la región con el despliegue de un portaaviones y bombarderos B-52, así como 1.500 efectivos más, un contingente que Bolton describió como “disuasor”.
El primer ministro de Catar llegó el jueves a Arabia Saudí en la primera visita de un responsable catarí de ese rango desde la crisis que estalló en el 2017, según un medio de comunicación catarí.
El jeque Abdulá bin Naser bin Jalifa al Thani fue recibido por altos funcionarios del reino, anunció la agencia oficial de Catar (QNA). El jeque es igualmente ministro de Interior.
En junio del 2017, los saudíes y sus aliados árabes rompieron relaciones con Catar, al que acusan de apoyar a grupos islamistas extremistas, así como a Irán, unas acusaciones negadas por Doha.
Las cumbres coinciden con los últimos días del ayuno del ramadán, por lo que se celebrarán de noche, cuando los musulmanes ya pueden comer.