San José
Los precios al consumidor toman impulso y en marzo la variación interanual del índice (de cada mes respecto al mismo mes del año anterior) aumentó un 1,58%; el valor más alto registrado desde abril del 2015.
Según informó esta mañana el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), solo en el mes de marzo del 2017, respecto a febrero del 2017, el índice de precios retrocedió 0,42%; pero comparado con un año atrás se da un incremento.
La variación acumulada en el primer trimestre del año fue de 0,55%.
Según el comunicado del INEC, durante marzo los bienes y servicios que mostraron un mayor efecto negativo en el indicador (por su reducción y por la importancia en el presupuesto de los hogares) fueron tomate, cebolla y gasolina.
Por otra parte, alquiler de vivienda, gas licuado y papa figuraron entre los principales bienes con mayor efecto positivo (presionaron el índice al alza).
En ese mes, de los 315 bienes y servicios que integran la canasta de consumo, 47% aumentaron de precio, 39% disminuyeron y 14% no presentaron variación.
Precisamente, para evitar presiones inflacionarias el Banco Central anunció el miércoles pasado un incremento en la tasa de política monetaria, de 1,75% a 2,25%.
Angélica Villegas, Gerente de Estrategia de Aldesa, comentó que el movimiento en la tasa de política monetaria se da básicamente porque la inflación, medida por el índice de precios al consumidor interanual, ha venido mostrando una fuerte tendencia al alza desde julio del 2016.
"Es de esperar que veamos un aumento en la inflación dado que, si comparamos los precios del petróleo de hace un año, para marzo del 2016 el precio promedio fue de $39,79 versus $52,53 (hoy)", comentó Villegas.
La meta del Banco Central para este año es que la inflación se ubique en un rango que oscile entre 2% y 4%.
Consultado sobre la implicación en otros indicadores, el economista Miguel Loría comentó que, pese al repunte, todavía es una inflación moderada.
No obstante, si la tendencia se mantiene podría tener implicaciones sobre el tipo de cambio, pues son variables que se retroalimentan, y en la próxima negociación salarial.
Hay también algunos indicadores que dependen de este índice, como el impuesto a los combustibles, el cual se ajusta en forma trimestral.
Loría añadió que también los conflictos bélicos, como la situación en Siria, podría generar mayores presiones sobre los precios de los combustibles.