¿Cuándo es un buen momento para cambiar de trabajo? Una pregunta que, sin duda, muchas personas se han hecho en la vida.
164.000 personas que actualmente tienen empleo están buscando otra opción en el mercado para moverse de empresa, ellos se suman a los 229.000 desempleados de Costa Rica durante el primer trimestre del 2018.
Esta cantidad de personas se conoce como la tasa de presión general, según los datos de la Encuesta Continua de Empleo (ECE), del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
La tasa de presión general fue del 17,6% en el primer trimestre del 2018, esto significa un crecimiento interanual de 2,4 puntos porcentuales que finalmente se traducen en 30.000 personas más que ingresaron a este indicador (desempleados y personas con empleo que buscan otras opciones).
LEA MÁS: ¿Sabe qué hacer con su carrera tras 10, 20 o más años de trabajo?
Entre quienes trabajan, pero están en la búsqueda de un cambio, destaca que el 35,3% lo hace para tener mejores condiciones laborales, 31% aspira a mayor estabilidad, 19% desea aumentar su salario y 8,7% desea desempeñar un empleo más afín a su profesión.
Después de analizar los datos del mercado laboral costarricense, es momento de identificar algunas señales que, según los especialistas, le podrían dar una alerta: es tiempo de cambiar de trabajo.
5 claves para identificar el momento
Si usted es un trabajador que poco a poco perdió el interés en sus labores, siente que cayó en una rutina y dejó de aprender en su puesto. Preste atención, quizás es hora de hacer cambios.
Cristina Cubero, directora de Consultoría de Deloitte; Laura Centeno, gerente de Asuntos Laborales de Ulacit, y Dahiana Arias, gerente país de ManpowerGroUp Costa Rica, detallan cinco claves para detectar cuándo es momento de dejar su trabajo y buscar nuevos retos.
1- Se siente estancado, no hay motivación
Cuando usted va a su trabajo y empieza a sentir que está estancado, que hay pocas opciones de crecer y que ya no hace las tareas diarias con la misma motivación, es entonces cuando se levanta la primera bandera de alerta.
En ese momento la persona debe analizar si existen retos que le den nuevos conocimientos o experiencias a su carrera, o si, por el contrario, todo se convirtió en una rutina que puede desarrollar sin mayor esfuerzo.
Esta situación puede generar aburrimiento o apatía en el colaborador.
2- ¿Puede crecer?
Cuando una persona lleva años trabajando con pasión y empeño, siempre espera crecer de diferentes maneras dentro de la empresa. La posibilidad de ascender de puesto o moverse a una nueva posición dentro de la compañía puede refrescar los aires de un colaborador que quiere otros retos.
Si la empresa no ofrece esas posibilidades o el trabajador considera que ya no tiene opciones de crecimiento interno, aparece la segunda señal. Quizás deba contemplar un cambio.
3- Ojo por ojo
Los trabajadores deben hacer una evaluación de su situación laboral. En un lado de la balanza pueden colocar lo que ellos aportan a la empresa y, en el otro extremo, lo que la compañía les compensa o retribuye. Por ejemplo, desarrollo de la carrera, nuevos proyectos, incentivos, etcétera.
LEA MÁS: ¿Está a punto de colapsar en el trabajo? ¡No es el único!
Cuando el colaborador hace esta valoración y sus resultados son desfavorables, podría identificar que sus metas y objetivos no van de la mano con lo que le ofrece la empresa. Aquí aparece otra señal a la que debe ponerle atención.
4- Frustración o desesperanza
El trabajador está en desacuerdo con la forma en que se manejan algunas cosas de la empresa, siente que cuando ofrece aportes no se toman en cuenta y su margen de oportunidades para ejecutar mejoras es muy pequeño.
Tiene jefes que le limitan las opciones de destacar o de promover cambios con su trabajo. Se siente frustrado porque empieza a creer que sus tareas no aportan valor, entonces viene la desesperanza: las cosas nunca van a cambiar aquí.
De seguro esta es una señal fácil de identificar, pero no siempre las personas lo entienden como una razón para pensar en un cambio laboral, en ocasiones lo ven como un reto que les plantea su propio puesto.
5- Cansancio, estrés y ambiente tóxico
Si su puesto actual le produce estrés y le genera cansancio, le resta tiempo para sus actividades personales o le impide desarrollar otras tareas de crecimiento como estudiar y capacitarse, puede que su tiempo en ese empleo sea corto.
El estrés es una de las razones que lleva a las personas a hacer cambios laborales.
Algunos colaboradores están dispuestos a asumir más tareas a cambio de un aumento salarial, pero las grandes cargas de trabajo solo acortan el ciclo laboral de una persona en una compañía.
Otra señal de que se requiere un cambio, es el ambiente tóxico por malas relaciones entre compañeros, liderazgos deficientes o factores negativos de la organización.
El dilema: ascender o irse
Otra pregunta que surge con frecuencia entre las personas que trabajan es: ¿busco un cambio dentro de la misma empresa o me voy para un nuevo empleo?
Sobre este punto, Cristina Cubero considera que los colaboradores deben analizar diferentes elementos.
"Si las condiciones laborales, de liderazgo o de clima no son positivas, o bien si existe un área de interés o especialización que no se ubica en la empresa actual la mejor vía será explorar el mercado", señaló la directora de Consultoría de Deloitte.
Para Laura Centeno, lo ideal es empezar un proceso de cambio interno antes de tomar la decisión de irse a otra compañía.
"Un buen ciclo laboral dentro de la misma empresa puede ser de cinco años en diferentes puestos. Un cambio de empresa puede ser la oportunidad de aprender diferentes formas de trabajo, industrias, productos o servicios", agregó la gerente de Asuntos Laborales de Ulacit.
Dahiana Arias recomienda a las personas identificar los factores que provocan el descontento con el actual empleo y luego identificar posibles espacios para mejorar o crecer dentro de la misma empresa.
El reto de retener talento
Cuatro de cada diez personas de la generación millennial planean dejar su trabajo actual en los próximos dos años y solo el 28% considera quedarse por al menos cinco años en su compañía.
Los datos se desprenden de la Encuesta Anual de Millennials de Deloitte, un estudio que se aplicó por sétimo año consecutivo a 10.455 jóvenes, que nacieron entre enero de 1983 y diciembre de 1994, en 36 países.
LEA MÁS: Menor fidelidad de 'millennials' con las empresas desafía la retención de talento
La investigación evidenció un deterioro en la lealtad de los trabajadores más jóvenes hacia las empresas, en comparación con el resultado del 2017.
Entonces, ¿cómo puede una empresa retener talento de un trabajador que no está motivado, que no encuentra oportunidades de crecimiento o que está cansado?
En compañías donde existe una correcta gestión del talento, de manera proactiva se identifican casos o se habilitan espacios para que las personas construyan su propia ruta de carrera interna. Esto les permite manifestar sus intereses y habilidades para ubicar una posición en la cual podrá crecer en línea con sus intereses.
"Actualmente existe en el país y en el mundo una 'brecha de frustración de carrera' ya que las organizaciones están habilitando nuevos espacios de crecimiento en atención a necesidades de las empresas o de la especialidad de los colaboradores, pero siguen trazando planes de carrera en atención a los puestos tradicionales, esto hace que las personas puedan identificar nuevas áreas o proyectos en sus empresas, pero no se han preparado lo suficiente para acceder a ellas", aseveró Cubero.
El estudio Human Age de ManpowerGroup señaló que las personas más jóvenes prefieren trabajar en empresas que compartan sus mismos valores y tengan un propósito social.
"Si esto no ocurre así, es probable que el colaborador opte por un trabajo en una nueva compañía", apuntó Arias.
El reto de las empresas consiste en crear programas para identificar en qué parte del ciclo están sus colaboradores y así generar sistemas de incentivos y premios que les ayuden a desarrollar lealtad.
Las compañías también deben enfocarse en abrir espacios para capacitar personal y para que los colaboradores puedan asumir nuevas tareas que les permitan mantener vivo el sentimiento de aprendizaje constante.
Puede que en su caso solo esté presente una de las cinco señales que le alertan cuándo es un buen momento para cambiar de empleo, pero una de estas situaciones es suficiente para que usted tome una decisión.
Antes de dejar su empresa y su puesto actual, analice qué le ofrece el mercado, identifique posibles compañías a las que le gustaría moverse, planifique su salida y siempre trate de dejar un buen recuerdo en su trabajo.