La percepción de las personas sobre la evolución de la economía costarricense mejoró en los últimos seis meses, pero aún se mantiene en un terreno pesimista donde las opiniones desfavorables sobrepasan a las positivas.

El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) se ubicó en 37 puntos, en una escala de cero a 100, y tuvo un incremento de 8,2 puntos en las mediciones de los últimos dos trimestres.

Así lo detallan los resultados de la encuesta Confianza de los Consumidores, preparada por la Escuela de Estadística de la Universidad de Costa Rica (UCR), publicados este miércoles 26 de febrero.

En agosto del año pasado, el resultado del estudio mostró que se llegó a uno de los niveles más bajos, desde el 2008, cuando el ICC fue de 28,5 puntos.

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Johnny Madrigal, coordinador del estudio, explicó que los resultados muestran una reducción de la incertidumbre de las personas, lo cual es positivo. Pero aún no se está en terreno considerado como positivo.

“En los últimos seis meses aumentó la confianza entre los hombres y las mujeres, y las personas de todos los niveles educativos. Eso quiere decir que el aumento es generalizado y homogéneo”, recalcó el investigador.

Pedro Morales, asesor económico de la Cámara de Industrias, calificó de buena señal los resultados del ICC.

Morales consideró que la mejora en la perspectiva de los consumidores, aunque aún se mantenga en zona pesimista, está relacionada con el proceso de recuperación económica que se inició a partir del segundo semestre del año pasado.

“Las familias perciben que a nivel de la economía se dan cosas que lo llevan a mejorar la confianza y eso permite una mejora en su consumo futuro y sus planes. Eso definitivamente repercutiría sobre un aumento en la demanda de bienes y servicios de las empresas”, destacó el especialista.

El ICC es un estudio trimestral que efectúa 700 entrevistas por teléfono a personas mayores de edad en todo el país. El Índice tiene un nivel de confianza del 95% y un margen de error de 3,7 puntos.

Economía familiar

La encuesta también mostró que el nivel de pesimismo para compra de casa o vehículos sigue alto, pero se redujo en los últimos seis meses.

Madrigal destacó que, en agosto pasado, el 77% de los entrevistados consideraron que era mal tiempo para adquirir una vivienda. En la medición de febrero fue el 64%. Una situación similar ocurrió en el caso de la compra de un automóvil.

En cuanto a los ingresos familiares, el 45% de los consultados opinaron que su nivel de ingresos será mayor en los próximos 12 meses.

En el caso de la capacidad de compra, el 19% opinó que sus ingresos crecerán más que los precios, pero casi la mitad consideró que seguirá igual.

El coordinador del estudio destacó que hubo una mejora en la percepción de la economía familiar, lo cual muestra la capacidad de compra un poco más favorable.