Gustavo Vargas Fernández, quien falleció este lunes 10 de agosto a sus 51 años, lideró como gerente general el Banco Nacional, el más grande del país, en meses difíciles para la economía de Costa Rica.
La presidenta del conglomerado financiero, Jeannette Ruiz, contó que a las 8 a. m. recibieron la alerta del fallecimiento por parte de la familia de Vargas.
“Aún estamos en shock. Es una gran pérdida para la sociedad costarricense en general, para el Banco Nacional, y para el país, que una persona y un funcionario del nivel y valores de don Gustavo se nos haya ido”, lamentó Ruiz.
Ella detalló que Vargas, de 51 años y vencino de La Unión, en Cartago, no tenía ningún antecedente médico relevante.
Vargas, quien laboró cerca de 30 años en la institución, fue nombrado como gerente interino en agosto del 2018, justo en los meses en los cuales el país vivía una gran tensión por la incertidumbre fiscal y la discusión del plan fiscal que desembocó en la huelga de tres meses de los maestros, así como en manifestaciones y huelgas que golpearon la producción nacional.
Fruto de la difícil situación del 2018, la morosidad aumentó y cuando Vargas fue nombrado como gerente general, en diciembre de ese año, la entidad pasaba por un proceso de ajustes, pues registraba seis meses en que el indicador de mora a más de 90 días superaba el nivel de normalidad determinado en ese momento por la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).
LEA MÁS: Murió Gustavo Vargas, gerente del Banco Nacional
Economista graduado de la Universidad de Costa Rica (UCR), con una maestría en Administración de Negocios de INCAE Business School, fue confirmado como gerente general el 3 de diciembre del 2018; justo un día después, el 4 de diciembre, se publicó la nueva Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.
El 2019 fue un año marcado por la aplicación de la nueva ley fiscal, pero también por un fuerte endeudamiento de los hogares lo que llevó al Gobierno a anunciar, en octubre de ese año, la creación del Programa de Crédito de Salvamento para Personas Sobreendeudadas que instruyó a los bancos estatales diseñar un plan especial llamado Crédito de Salvamento, para el refinanciamiento de préstamos a personas físicas asalariadas del sector privado y público.
En diciembre del 2019, el Banco Nacional presentó, su Programa de Salvamento que contaba con un monto de ¢100.000 millones para la readecuación de operaciones crediticias solo en colones.
A finales del 2019 se respiraba un aire económico más tranquilo y la esperanza de recuperación de la economía lo que hacía pensar que el 2020 se daría un crecimiento moderado del crédito.
En ese momento, Vargas destacó que el incremento del crédito sería principalmente en colones y preveía que la cartera de crédito aumentaría 4% este año.
LEA MÁS: Banca pública proyecta moderado crecimiento del crédito en 2020
No obstante, en marzo llegó el nuevo coronavirus al país, lo cual significó un nuevo reto para el Banco Nacional, y en general, para el sistema financiero.
Para atenuar los efectos de la crisis, el Banco Nacional anunció, el 20 de marzo del 2020, una flexibilización en sus políticas de crédito.
Diez días más tarde, el intermediario anunció la concreción de acuerdos para readecuar los pagos de 107.305 créditos, de tal manera que se les prorrogaba las cuotas en los próximos meses y estas se añadían al principal, o se pagaban posteriormente, para ayudar a paliar la emergencia por el coronavirus.
En junio pasado, la entidad extendió hasta diciembre próximo las prórrogas en el pago de créditos solo a los clientes que demuestren una afectación a raíz de la pandemia del coronavirus.
Este mes de agosto, Vargas respaldó el proyecto de ley para la creación de un Fondo Nacional de Avales y Garantías presentado por el Poder Ejecutivo la semana pasada, con un capital de $300 millones de dólares aportados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
“Este tipo de medidas, estimulan la confianza en la economía, lo cual es un elemento fundamental para la reactivación del país. Costa Rica requiere ejecutar este tipo de instrumentos, sobre todo, en medio de un contexto de desempleo histórico del 24% y ante la recesión económica que estamos afrontando con la pandemia”, indicó Vargas, el viernes pasado.
En su periodo, el Banco Nacional fue nombrado, el pasado 29 de junio, Entidad Libre de Efectivo, certificado que otorga el Banco Central, a las entidades que maximizan el uso de medios electrónicos para sus transacciones de cobro y pago.
LEA MÁS: Banco Nacional se desmarca de las pérdidas en Asebanacio por créditos malos
A lo interno del Banco, el exgerente también afrontó retos como fue la negociación de la convención colectiva y las pérdidas registradas por la Asociación Solidarista de Empleados del Banco Nacional, debido al otorgamiento de créditos riesgosos.
En el caso de la Asociación, Vargas y la presidenta de la entidad, Jeannette Ruiz, enfatizaron en que la institución pública no tuvo ninguna responsabilidad del daño económico en la Asociación.
LEA MÁS: Directiva del Banco Nacional nombra a gerente interino por fallecimiento de Gustavo Vargas
Ahora la batuta la tomará como gerente interino, Allan Calderón, quien se desempeñaba como subgerente de Crédito y Riesgos y labora en el Banco desde el 2003.
Colaboró en esta información el periodista Óscar Rodríguez.