Samuel y Ezequiel, los hermanos que nacieron unidos por su cabeza hace dos años y cinco meses, ya están preparándose para volver a casa.
Olga Arguedas, directora del Hospital Nacional de Niños (HNN), indicó este miércoles en conferencia de prensa que, aunque no se saben fechas exactas, Samuel saldrá en el transcurso de la próxima semana.
Ezequiel lo hará días después, pues aún los médicos le están controlando ciertas infecciones y está bajo tratamiento con antibiótico.
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Stallin Núñez y Evelyn Badilla, padres de los menores, reciben capacitación en cómo darles los cuidados necesarios en el hogar.
"Los papás ya están en entrenamiento. Son personas educadas y muy pendientes del bienestar de sus hijos", confirmó Arguedas.
Además agregó: "La idea también es que los niños ya estén en su hogar para cuando comience el pico de infecciones respiratorias y así no se expongan a otras infecciones".
Kattia Camacho, especialista en infectología, recalcó que los menores no requieren cuidados extremos de salud, pues su condición no es crítica.
"A diferencia de otros niños, que por ejemplo acaban de pasar un trasplante y están inmunosuprimidos (con medicamentos que les bajan las defensas para evitar el rechazo del órgano nuevo), Samuel y Ezequiel están bien de defensas, son niños que están sanos en términos generales y eso ayuda a que evolucionen mejor y sin necesidad de cuidados extremos", enfatizó la especialista.
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Evolución
En un inicio se habló de que los menores estarían al menos seis meses internados, pero como su evolución se ha mantenido hacia la mejoría, pronto podrán salir del hospital.
“Los récords son para los deportistas, pero sí hemos visto que han evolucionado bien. Ellos aún deben seguir en control, pero pronto podrán hacerlo en casa”, afirmó Juan Luis Segura, jefe de Neurocirugía del HNN y quién lideró la cirugía de separación.
Los menores se irán al hogar con un solo medicamento que deben tomar a diario y un spray. En el caso de Samuel, él debe recibir una pequeña cantidad de oxígeno suplementario, por lo que se irá a casa con un tanquecito de oxígeno, pero los médicos confían en que deba utilizarlo por poco tiempo.
La alimentación es otro tema vital. Como su sistema digestivo estuvo tanto tiempo "dormido", debe recuperarse poco a poco. De momento son alimentados por sonda y con esta alimentación se irán a su vivienda.
"Ambos reciben una fórmula con todos los nutrientes y calorías que necesita un niño de su condición", aseveró Camacho.
Por otra parte, las cicatrices de su cirugía evolucionan positivamente. Segura afirmó que aún deben esperar a que el proceso de cicatrización finalice por completo para reconstruir el cráneo de los menores.
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¿Qué sigue?
La recuperación ahora se enfoca en su rehabilitación física y en su neurodesarrollo. Samuel y Ezequiel seguirán visitando el HNN para citas de control dos veces por semana, donde permanecerán bajo vigilancia de 15 subespecialidades médicas.
Además, especialistas en terapia física, terapia ocupacional, neurodesarrollo y psicopedagogía acompañarán paso a paso a los menores.
"Hay que ir poco a poco. Mi ilusión más grande es verlos caminar y que lleguen aquí al hospital caminando y hasta pegando gritos de alegría, pero todo esto es un proceso que debe ir poco a poco, no podemos adelantarnos a los resultados", expresó Segura.
Los gemelos Núñez Badilla, de dos años y cinco meses, nacieron unidos por su cabeza y compartían vasos capilares y parte de su cerebro. Fueron separados durante el viernes 23 y sábado 24 de febrero, en una cirugía de 20 horas, única en el país.
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