Las compañías Toyota y General Motors anunciaron incrementos en sus ventas para el trimestre que va de abril a junio, en vista de que el mercado de automóviles avanzó por una mejoría en el control de la pandemia y pese a los problemas en el suministro de semiconductores.
El beneficio neto de Toyota se disparó más de un 460% en el primer trimestre, impulsado por la recuperación de las ventas por la mejora de la crisis sanitaria, anunció este miércoles 4 de agosto el fabricante de automóviles.
El líder mundial en ventas de coches registró un beneficio neto de 897.800 millones de yenes ($8.200 millones) en el primer trimestre, que empezó el 1.° de abril, un récord para este periodo y un aumento respecto a los 158.800 millones de yenes del mismo intervalo del año anterior.
Sin embargo, la compañía mantuvo su previsión de beneficio neto para todo el año en 2,3 billones de yenes, alegando "incertidumbres durante y después del segundo trimestre".
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Por su lado, General Motors elevó este miércoles sus previsiones de ganancias para el 2021, debido a la fortaleza de los precios de los vehículos cuando los inventarios de automóviles se han visto limitados por la escasez de chips semiconductores.
El fabricante estadounidense registró un beneficio neto de $2.800 millones de abril a junio, frente a una pérdida de $806 millones en el mismo período del año pasado, con una facturación casi duplicada, de $34.200 millones.
Fuerte recuperación
Toyota se ha recuperado del impacto de la pandemia de la covid-19 más rápidamente que sus competidores y la semana pasada dijo que las ventas mundiales alcanzaron un récord en los seis meses hasta junio, gracias a la demanda de sus modelos Highlander y Camry en Estados Unidos y de las marcas Corolla y Lexus en China.
“Los resultados del primer trimestre fueron el resultado de que mantuvimos (...) unas ventas y un suministro estables, a pesar de la escasez de semiconductores y la propagación de la covid-19”, dijo la compañía en un comunicado.
El gigante japonés ha logrado superar hasta ahora la escasez mundial de semiconductores, que ha obligado a sus rivales a recortar objetivos de producción, pero ahora se enfrenta a algunos problemas.
En junio, Toyota suspendió temporalmente las operaciones en dos plantas nacionales por la escasez de chips e interrumpió brevemente la actividad en otra fábrica.
"Se espera que el suministro de semiconductores siga siendo escaso al menos hasta el año que viene porqué la recuperación económica mundial tras la pandemia de coronavirus debería impulsar la demanda de chips en muchos sectores", dijo Yasuo Imanaka, analista jefe de Rakuten Securities.
Reacomodo
El grupo General Motors, como todo el sector de la automoción, ha sufrido desde principios de año por la falta de semiconductores, elementos que se han convertido en imprescindibles en los vehículos para sus componentes de electrónica.
Pero GM ha priorizado sus automóviles más demandados y más rentables, como camionetas y SUV.
El brazo financiero de la compañía, que presta dinero para adquirir coches, también se está beneficiando de los precios mucho más altos de los vehículos usados, que se han disparado por la baja producción de vehículos nuevos.
La situación en el lado de los semiconductores sigue siendo impredecible, estima GM, y los desafíos de la cadena de suministro persistirán en la segunda mitad del año.