Aficionada de Alajuelense se impresionó con reacción de las leonas por cartel que llevó al estadio

Los carteles con mensajes significativos se volvieron una costumbre en el estadio cuando juega el equipo femenino de Alajuelense.

En medio del bullicio generado por poco más de 3.000 aficionados que presenciaron el partido entre la Liga y Herediano, en las gradas no solo se leía la promesa que se convirtió en realidad: ‘Nunca volverán a jugar en silencio’.

Había otro muy particular, que no pasó desapercibido y que lo llevaba la aficionada liguista Nathalie Horvilleur.

En una cartulina blanca y usando un pilot negro y uno rojo, ella anotó: ‘Ayer me gradué de la U y vengo a celebrar con las leonas’.

¿Cómo se le ocurrió y cómo fue la experiencia de la recién graduada al ver la respuesta que tuvo ese mensaje?

“Estaba con mis mejores amigos y les conté que ya me había graduado y que planeaba ir a ver a las leonas al día siguiente y me dijeron: “Vas a celebrar con las leonas” y les respondí que sí”, relató Nathalie Horvilleur.

Fue en ese momento cuando se le ocurrió hacer el cartel para compartir su historia.

“Después de todo me gradué de Ciencias del Movimiento Humano (conocido como educación física) y siempre ha sido mi sueño trabajar en Liga Deportiva Alajuelense. Así que decidí no tener pena y hacer el cartel y esperar que alguien pudiera darse cuenta para celebrar todos juntos”, reseñó.

Su anhelo de en algún momento trabajar en Alajuelense es un sueño que ha tenido desde siempre, porque asegura que le encantaría poner sus estudios y su pasión en práctica juntos.

Ella quería celebrar su logro con todos, pero confiesa que no dimensionó que ese cartel provocara que de verdad las jugadoras en su totalidad se dieran cuenta.

“Esperaba un par de fotos tipo medio tiempo, pero no que todas las jugadoras se involucraran en firmar el cartel y felicitarme como lo hicieron. Realmente ellas comparten y se involucran siempre mucho con los aficionados que van a apoyarlas. Están siempre muy atentas al apoyo que se les da”, expresó.

Y agregó: “Realmente me sentí muy especial y sentí mucho orgullo de saber que jugadoras que le ponen tanta garra y empeño en lo que hacen me dieron mérito en mi logro. Fue muy tuanis saber que ellas están accesibles a compartir con uno momentos importantes”.

Desde su rol como aficionada, Horvilleur afirma sentirse muy motivada al ser testigo de la revolución que vive el fútbol femenino y su esperanza es que se continúe en esa línea de crecimiento.

“Como mujer y como profesional en el área deportiva me entusiasma mucho ver cómo a poco la gente se va involucrando en el fútbol femenino. Sé y tengo fe de que pronto se va a profesionalizar más y va a seguir creciendo. Mientras tanto, yo voy a seguiré apoyando la revolución para que las jugadoras sientan el apoyo y el respaldo que se merecen”, destacó.

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Horvilleur no sabía qué la hacía más feliz el miércoles, aunque en realidad era una mezcla de todo.

El día anterior obtuvo el título universitario por el que tanto luchó. Además, estaba viendo a su equipo hacer una exhibición de fútbol, con remontada y goleada incluida, en un partido en el que Alajuelense venció 5 a 1 a Herediano.

Y estuvo en esa gradería bulliciosa que no dejó de apoyar a las jugadoras ni un solo instante, dándole un matiz muy distinto a los partidos de fútbol femenino.

“Fue un ambiente que cualquier equipo envidiaría. Era un partido que se jugó tanto en cancha como en gradería y la afición se hizo sentir. Poco a poco va creciendo la afición la rama femenina pero los cantos, los gritos y la pasión no faltaron y cualquier equipo desearía vivir lo que pasó en el Morera. Es una afición que no tiene comparación y que está presente hasta la muerte”, finalizó Nathalie Horvilleur.

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