¿Hasta dónde deben llegar las explicaciones de los técnicos por el rendimiento de su equipo? Muchas veces los mismos entrenadores, jugadores y dirigentes dicen que se deben a la afición, pero en ciertos momentos esto queda en un discurso.
Creo que el técnico de Saprissa, Wálter Centeno, está en uno de esos instantes.
Una vez más Paté enfrenta las críticas. Desde que llegó al banquillo morado ha lidiado con eso y probablemente, por su formación y carácter, no le afecte para seguir con su trabajo.
Sin embargo, hay cuestionamientos que permanecen en el tiempo y cuando la afición pide respuestas, no las recibe como quisiera.
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Por eso de nuevo me viene a la cabeza la pregunta: ¿Hasta dónde el técnico de Saprissa debe darle explicaciones a su afición? o incluso, ¿los morados merecen mejores explicaciones?
Durante este torneo los principales reproches han sido dirigidos hacia la parte ofensiva, pero nuevamente la defensa apareció.
Esa zona tan señalada en la era Paté estaba “descansando” de los dardos... hasta el sábado en el clásico.
Y uno de los más criticados es Alexander Robinson. He leído todo tipo de comentarios de la afición saprissista. Desde que el sábado se dio la alineación ya había interrogantes.
El colega Gustavo López le consultó al estratega si algunos jugadores (Michael Barrantes, Aubrey David) habían dejado de hacer algo para estar en la titular.
“Son decisiones técnicas”, dijo en la conferencia de prensa. Realmente creo que gran parte de la afición esperaba más que eso. Yo, como periodista, esperaba más que eso.
Obviamente son decisiones técnicas, porque el entrenador, apoyado en su equipo, es quien decide la alineación.
El punto era, ¿por qué se toman esas decisiones? Y la respuesta, palabras más palabras menos, fue esa. Aunado al deseo de darle continuidad al equipo que empató, en casa, ante San Carlos.
“(...) ya habíamos hablado eso a lo interno del grupo y son decisiones meramente técnicas. Todos están aptos para jugar y es toma de decisiones, simplemente”.
En Twitter leí de un aficionado que prefería errores de una joven promesa y no de un experimentado, en referencia a Alexander Robinson.
También de por qué no hacer uso de Johnny Acosta, un experimentado al que tantas veces pidió Paté y que cuando ha jugado lo ha hecho bien.
Sus razones tendrá el entrenador del equipo, aunque estas no han quedado claras.