Áncora

Al borde del abismo: de ‘Sueños eléctricos’, violencia y poesía

El filme costarricense ‘Tengo sueños eléctricos’, de Valentina Maurel (2022), propone un tema controversial en una sucesión de imágenes que oscilan entre la brutalidad y la ternura

EscucharEscuchar

Tengo sueños eléctricos, de Valentina Maurel (2022), que en pocos meses se ha hecho acreedora de más de una veintena de los premios más importantes en festivales como Locarno y San Sebastián, en otros tan alejados como India, Grecia e Islandia, y recientemente en nuestro país, presenta una historia que se aleja de cualquier estereotipo. A Maurel no le gustan las propuestas fáciles, en blanco y negro. Busca la complejidad de los seres humanos y de sus relaciones, de las pequeñas cosas que los representan incluso en el color casi táctil de los lugares que habitan sus personajes.








En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.